"Estoy harta de que me siga pasando después de 20 años girando, gestionándomelo todo yo, que todavía exista esta desigualdad y sobre todo esta desigualdad en el trato y esta presión con la que tenemos que vivir", reconocía ella misma. Una situación que vive prácticamente en todos sus conciertos, y no solo ella, también el resto de mujeres de su equipo. "Noelia, es la persona que yo conozco que más sabe de sonido con la que he trabajado nunca. Más que mi técnico de monitores, Sergio, que es fantástico, es mi hermano", reconoce.
"Siempre va a llegar un hombre a intentar decirle que no tiene ni idea"
Y a pesar de ello, esta también sufre día sí y día también situaciones machistas por no poner en valor el trabajo que sabe hacer: "Cuando hay problemas técnicos en los festivales están todos ahí mirando la mesa, de repente ves todo hombres alrededor de la mesa. 4 tíos que no saben lo que pasa y va Noe y siempre lo arregla". A pesar de ello, esta tiene que hacer frente a que cuestionen que sepa hacerlo: "Siempre va a llegar un hombre a intentar decirle que no tiene ni idea de lo que está pasando".
Unas situaciones que ponen a su compañera al límite, algo que luego, por culpa de este machismo, también se vuelve en su contra: "Luego como está cabreada porque está ninguneada continuamente, lo que acaba pasando es 'joder, que tía más borde'. No, es que encima tiene que ser maja porque el rol de la mujer encima es simpática y agradable. Pues no, mira, es una tía seria que sabe hace su trabajo y tú eres un puto gilipollas que no la respetas entonces no va a ser maja contigo, va a ser maja con las personas que se lo merecen". Algo que le enfada ahora que lo cuenta porque, para su desgracia y la de muchas compañeras, "es la situación que vivimos".