Taylor Swift desfilaba por la alfombra roja de los considerados los Oscar de la música con un precioso conjunto de falda y top en color azul noche con lentejuelas engarzadas en todo el conjunto. El pelo recogido y unos imponentes pendientes completaban el look con el que acaparaba todas las miradas de la noche. Su expareja, Harry Styles, tampoco se queda atrás, pues el artista siempre se caracteriza por acaparar todas las miradas con sus llamativos looks.
En los Grammy 2023 no iba a ser menos y su mono de rombos de colores con el pecho al descubierto fueron un éxito. Dejando a un lado los estilismos, el momento encuentro entre la expareja se tenía que producir tarde o temprano, y así fue. Algunas cámaras captaron como los ex se saludaban entre el público y tenían una breve charla, quizás para ponerse al día de sus vidas o felicitarse por los éxitos cosechados.
Dándolo todo
Las cámaras captaron como Taylor Swift se levantaba de su asiento para darlo todo al ritmo de la canción de su expareja. Desde Page Six aseguran que la cantante "saltó de su asiento" nada más escuchar la canción y se puso a bailar sin importarle el qué dirán. Era divertido verla porque nadie de su alrededor estaba bailando, por lo que todavía llamaba más la atención. ¿Quién dijo que los ex se tienen que odiar? Aquí está la prueba de que no siempre tiene por qué ser así.