Ha pasado mucho tiempo desde que Rosa López abandonara la casa de 'Operación Triunfo'. A pesar de que pudimos vivir las 24 horas del día a día de la granadina aún tenemos una cuestión pendiente, ¿quién es realmente Rosa López? Eso es lo que pretende averiguar Bertín en esta última entrega de 'Mi casa es la tuya'. La cantante repasará su vida personal, su paso por la Academia y realizará confesiones nunca vistas.
La vida sentimental de la ganadora de la primera edición de O.T ha sido todo un misterio, Desde que revelara en la última entrega del programa, 'El reencuetro', que había estado locamente enamorada del pianista del reality, poco hemos sabido sobre ella, y ahora empezamos a entenderlo todo... ¡La artista lleva dos años sin estar con un hombre! Después de esta gran revelación Bertín queda completamente estupefacto, pero Rosa parece no darle importancia, ya que ella prefiere esperar a "un hombre con cabeza, cabeza, pero la de arriba. Bueno, la de abajo también", comenta pícara y entre risas la artista.
El fantasma del pasado
Si bien el tema de su vida amorosa es algo que lleva con normalidad hay un aspecto de su persona que aún le sigue perturbando: " Hay cosas de mi pasado que me dan vergüenza ver. Hay veces que no se entiende lo que digo. Para solucionarlo he tenido que ir a logodedas, psicólogos, coaching..." Y es que la cantante aún siente pavor de la Rosa del pasado, de esa Rosa inocente de la Academia, a pesar de ser la Rosa que enamoró a toda España.
Rosa López, Chenoa, Geno, Gisela, David Bustamante y David Bisbal actuando en Eurovisión 2002Aunque a veces 'repudie' su pasado hay algo que rescataría de él sin lugar a dudas, su padre, el cual falleció en 2008. La artista no puede evitar emocionarse al recordar como "el hombre de su vida" lo dejó todo para que pudiera cumplir su sueño. Además, rememora entre lágrimas uno de los momentos que más le marcó junto a él en su salida del reality: "Mi padre tuvo que salir a la puerta, llorando, para calmar a los que allí estaban, aclarándoles que ya iba a salir". De esta manera vemos como el éxito sacudía de repente a una familia humilde, que no supo gestionar en cierta modo el ascenso repentino de su pequeña. De hecho, su madre asegura que por nada del mundo desearía que Rosa volviera a Eurovisión, ya que vivió cosas "que no tenían que haber sucedido". La cantante no se corta y añade que su madre no quería que se dedicara al espectáculo porque veía en él mucho "putiferio".
La gran revelación: el intento de boicot
Su vida profesional también ha sido una historia de idas y venidas. Desde que saliera victoriosa de esa primera edición de 'O.T', pasando por esa experiencia tan estresante para su madre, Eurovisión, hasta hoy en día, la carrera de la cantante ha sido una montaña rusa, que casi la deja sin voz de tanto 'gritar'. Así, la granadina confiesa para Bertín uno de los peores momentos de su vida, cuando perdió la voz durante ocho meses en mitad de una de sus giras.
Rosa, Chenoa y Geno en el concierto de 'OT. El reencuentro'Sobre el suceso se ha especulado mucho, pero ahora es Rosa quien pone, irónicamente, voz a lo sucedido. Según cuenta la invitada, una mujer de su equipo insistió para que se sometiera a un control médico durante la gira en el que le pincharon algo cuyo contenido desconoce. "Ese concierto fue bien, el siguiente también pero, en el tercero noté que me asfixiaba ". Así denuncia las irregularidades que tuvo que vivir en el inicio de su carrera, que la volvieron a convertir en la misma chica insegura de antes.
En estos momentos malos siempre ha tenido en quién apoyarse, como en su padre y su madre; que tiene el honor de acompañar a los protagonistas en la comida, algún que otro compañero, como Geno; que también interviene en el programa recordando la primera depilación de Rosa, nada más y nada menos que a los 20 años, y por supuesto el deporte, que no duda en poner en práctica con el presentador, retándole a un duelo de Fit-Boxing.
Rosa retando a una pelea de Fit-Boxing a BertínAsí abre Rosa, no las puertas de su vida, sino las de su armario, uno lleno de complejos, el cual poco a poco ha ido vaciando, hasta llegar a convertirse en lo que es hoy, una mujer fuerte y luchadora, que no practica el boxeo solo como deporte, sino como modo de vida, aprendiendo que de cada golpe de la vida hay que levantarse.
