Muchos son los 'Directioners' que están desolados después de que su banda por antonomasia, One Direction, cancelara su concierto en Belfast -uno de los últimos antes de la separación-, justo treinta minutos antes del que show comenzase. La boyband afirmó que la suspensión del concierto se debía a que uno de los integrantes, Liam Payne, cayó enfermo. Los miles de fans abandonaron las instalaciones decepcionados tras haber pasado horas y horas de espera para un final tan inesperado.
No obstante, una hora más tarde del inicio del programa Styles, Tomlinson y Niall dieron la cara a través de sus respectivas cuentas de Twitter; mientras que Payne no se pronunció al respecto. El primero en hacerlo fue Harry: "Mi más sinceras disculpas a todos por el show de esta noche en Belfast. Estoy muy decepcionado, pero lamentablemente estas cosas pasan. Lo sentimos mucho. H", ha explicado.
Los 'Directioners', unos fans comprensivos
Naturalmente los aficionados están devastados, pero a la par están preocupados por la declaración, ya que para muchos seguidores este anuncio es similar a lo que ocurrió con Zayn Malik, que finalmente acabó dejando la banda el pasado mes de marzo. Otros, en cambio, estaban más preocupados por el bienestar de Liam.
Y los más dolidos expresaron su frustración en las redes arremetiendo contra la banda, pero principalmente contra Liam, asegurando que: "Se debe venir antes de cualquier cosa". Según el comunicado emitido por la banda, la enfermedad del cantante no era grave, pero esa noche era incapaz de realizar la actuación.