Lamentablemente tenemos que hablar de una nueva muerte en estos días. Luis Eduardo Aute, el conocido cantautor y artista en diferentes ramas, ha fallecido a los 76 años después de haberse quedado muy tocado por un infarto que sufrió en el año 2016. Sin duda, se va uno de los cantautores más importantes de todos los tiempos, que ha encandilado a el mundo entero con su música.
Ha sido la cuenta oficial de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) donde se ha confirmado la muerte de Luis Eduardo Aute: " De ninguna manera podremos olvidarte, Luis Eduardo. Hoy decimos adiós a un genio indiscutible de la música popular española. Tendremos que aprender a vivir 'sin tu latido'. Descanse en paz", rezaba el tuit de despedida para el artista.
De ninguna manera podremos olvidarte, Luis Eduardo. Hoy decimos adiós a un genio indiscutible de la música popular española. Tendremos que aprender a vivir "sin tu latido". Descanse en paz pic.twitter.com/l0pS8lLB4V
? SGAE (@sgaeactualidad) April 4, 2020
Luis Eduardo Aute ha pasado unos últimos años bastante complicados, concretamente tres y medio, tras haber sufrido un infarto en el año 2016. El cantautor tuvo que ingresar en el Hospital Gregorio Marañón tras comenzar a encontrarse mal y allí le tuvieron que intervenir porque había sufrido un infarto. Desde aquel momento, el artista no pudo volver a ser el mismo.
Recuperación lenta tras una vida llena de éxito
El cantautor quedó postrado en una silla de ruedas desde que sufrió el infarto y se alejó de la vida pública aunque su trabajo siempre quedará en la memoria de todo el mundo. Luis Eduardo Aute nació en septiembre de 1943 en Manila, Filipinas, y ha ido marcando a varias generaciones con su música, pero también siendo un gran poeta, compositor, director de cine y hasta pintor.
El mismo año en el que sufrió el infarto, Luis Eduardo Aute celebraba medio siglo en el mundo de la música con un espectacular concierto en el Auditorio Nacional de México, algo que le llenó de tremenda alegría. Ahora, el gran cantautor se ha marchado, en un momento complicado porque no tendrá la gran despedida que se merecía ni los suyos podrán decirle adiós de una forma cercana y tranquila. Descanse en paz.