Miley Cyrus vuelve a ser centro de la polémica. La cantante ha sido demandada por Michael May, de nombre artístico 'Flourgon', que asegura que el 50% del tema 'We can't stop' fue creado a partir de un fragmento de su canción 'We run things'. Según él, este fue "uno de los temas favoritos de los amantes de la música reggae en todo el mundo" desde que fue número uno en su país, Jamaica, pese a que nunca llegó a sonar en Estados Unidos.
Flourgon interpuso la demanda el pasado martes 13 de marzo en la Corte del Distrito de Manhattan. Este declara que, tanto la ex Hannah Montana como su sello discográfico RCA Records (propiedad de Sony Corp), robaron su material para la composición de uno de los temas más famosos de le artista, hasta tal punto que incluyeron su frase "We run things. Things no run we", que Cyrus canta como "We run things. Things don't run we". Cyrus es una de las compositoras de la canción junto a otras siete personas.
Miley Cyrus actuando en los MTV VMA 2017En la demanda también especifica que la canción "debe la base de su popularidad en las listas y su éxito altamente lucrativo al contenido protegido, único, creativo y original del demandante May". El artista jamaicano asegura que el año 2017 pasado buscó proteger su trabajo en la Oficina de Derechos de Autor de Estados Unidos y que obtuvo " una protección formal de derechos de autor " de todos los arreglos musicales que había hecho sobre el tema 'We run things'.
Reclama 300 millones de dólares
Una de las finalidades del jamaicano a la hora de interponer la demanda es frenar las ventas del single así como impedir que la americana pueda seguir interpretándola. Los documentos no especifican de cuánto será la compensación por este supuesto delito, pero los propio abogados de May refirieron al caso como un de "300 millones de dólares". Por su parte, los representantes de Miley Cyrus non han querido hablar sobre ello.
