Escándalo en Estados Unidos y en todo el mundo por la publicación de una imagen inédita de Michael Jackson a las pocas de morir. Ha sido durante el juicio contra el que era médico personal del rey del pop, Conrad Murray, al que se le acusa de homicidio involuntario.
La imagen ha sido desvelada por la fiscalía y defensa de Jackson, David Walgren, que ha ilustrado su argumentación con dos fotos del cantante, una del día 24 de junio aparentemente sano y ensayando para su gira mundial y otra con el cuerpo sin vida del autor de 'Thriller'.
A continuación, Walgren ha mostrado la misma imagen ampliada y con la palabra "Homicidio" sobreimpresionada. En la foto puede apreciarse claramente el cuerpo sin vida de Jackson, parcialmente cubierto con una sábana y todavía entubado.
¿Era necesaria la publicación de la foto de Jackson muerto?
Pocos minutos después, la foto de Jackson era portada en la mayoría de periódicos y portales de noticias del mundo no sin polémica. Se acusa a la fiscalía y los medios de buscar el morbo fácil con la difusión de esta foto hasta ahora inédita y exclusiva de la investigación.
Los fans de Michael Jackson han desatado su ira asegurando en todas las redes sociales que la fotografía no aporta nada a la investigación y que sólo pretende herir sensibilidades y manchar la imagen del cantante.
El fiscal acusa a Conrad Murray del asesinato de Michael Jackson
La foto de Michael Jackson muerto no ha sido el único elemento polémico de esta primera jornada de juicio. El fiscal también ha difundido una conversación privada entre el cantante y su médico, ahora en el banquillo de los acusados. En ella se aprecia cómo Jackson se expresa con dificultad sobre sus deseos de futuro, previsiblemente bajo la influencia de alguna sustancia.
Walgren asegura que en su última noche, el rey del pop comenzó a recibir sedantes de las 1:30 de la madrugada hasta que a las 7:30 pidió Propofol -un potente anestésico-, lo que el propio Jackson denominaba "su leche" para poder descansar porque no podía "funcionar sin dormir". El suministro por parte de Conrad Murray fue una " manifiesta negligencia ", según la acusación.
"Murray no veló por los intereses de Michael Jackson ni por su salud, sino por los 150.000 dólares al mes que recibía ", destacó la acusación. Se espera que el juicio pueda llegar a durar más de cinco semanas.