Bekia: Después de éxitos como 'Carlota' o 'Cicatriz', ¿qué vamos a encontrar en 'Adiós'? ¿Cuál es el mensaje?
Decir adiós es como decir hola, un nuevo empezar, yo quería simbolizar eso también en mi carrera, en la que quiero hacer un cambio... aunque voy a seguir haciendo lo mismo que llevo haciendo toda la vida, pero siento que cierro una etapa después de tantos años. Estoy a punto de cumplir 30 años y siento que realmente hay un cambio en mi vida, porque realmente estamos en constante cambio... El que me escuche y tenga 50 años dirá: "Pero, ¿qué dice este?" porque el tendrá su cambio y yo tengo el mío, ese es un poco el símil y la explicación.
B: Una de las claves para poder entender tu música son las letras, ¿cómo ha sido el proceso de creación de 'Adiós'?
I.R: Refleja un momento personal y profesional. Es un trabajo con el que quiero asentar un sonido, dejar mi huella más característica en lo nuevo, porque ya se me va reconociendo, se me va identificando, pero creo que es el momento de asentar, no tanto un estilo, porque al final es una palabra muy amplia y yo no he inventado nada, pero sí dejar un sello personal.
B: El hecho de que el videoclip esté en blanco y negro tampoco es casual...
I.R: El blanco y negro también hace referencia a ese cierre de una etapa mía, de despedir... porque al final del vídeo estoy yo sentado en el teatro viéndome cantar y esa es una metáfora de decir que aquí sigo, tanto la parte que está encima del escenario como la parte que tiene esa perspectiva. En cuanto al proceso de creación del vídeo, pues lo hice con mi amigo Marcco, con quien estoy haciendo los últimos vídeos, un amigo de Valencia, un muy buen tipo con mucho talento que tiene también sus canciones y somos muy colegas... Él es un crack de esto, se va con una cámara y hacemos el videoclip... no hay nadie más. Al principio puede parecer raro porque piensas "pero tío, ¿qué vas a grabar aquí?" y él te hace un pedazo de vídeo. Tiene ese rollito que me gusta a mí, como de peli y tal... yo le dije que quería que simbolizara este cambio de etapa y reflejara a este nuevo Isma, porque insisto en que no paramos de cambiar.
Elegí el teatro de mi pueblo, el Molí, el Centro Cultural donde he ido a ver obras de teatro y demás de pequeño, que me parecía un sitio romántico, porque al final en ese escenario he sido pequeño también y eso molaba hacerlo en el teatrito. Después nos vamos a la Llíria, que es un poco ese paseo nostálgico-pensativo. Al final, yo creo que lo importante es reflejar la garra tocando y que no me hace falta mucho más, porque cuando voy a cantar algo que es mio y son mis canciones no me rayo mucho porque quiero reflejar una parte honesta y directa, y creo que con esos puntos que reflejamos en el vídeo son suficientes para transmitir, que veas algo y te remueva. Es un videoclip más emocional que artístico... No hay una preparación tan artística como puedan tener otros artistas que se visten de una manera determinada para cantar según que cosas, yo tengo mi look pero no me lío tanto en eso, sino en lo emocional. Ese rollo de coger mi guitarra, ponerme a cantar y que me dé igual todo lo demás. Eso me gusta mucho porque al final es lo que sale de mí, lo coherente, lo que me hace sentir a gusto.
B: Si echamos un vistazo a trabajos anteriores encontramos colaboraciones muy interesantes, ¿hay alguna a la vista? ¿con quién te gustaría que fuera?
I.R: Todavía no puedo decir nombres, pero sí me gustaría sacar nuevas colaboraciones con lo nuevo que voy a sacar, sin lugar a dudas. Ya lo hice en 'Cara a Cara' en 2019, que hice un montón de colaboraciones, aunque en directo también he hecho bastantes con muchos colegas... de diferentes estilos, porque al final lo que me mueve son las personas, no los estilos. El estilo me puede condicionar si la persona que está cantando tiene un mensaje que no me llega, que no está conmigo, pero tengo un cariño enorme a todos los artistas con los que he colaborado y creo que son coherentes como personas y como músicos, así que seguramente las colaboraciones que vayan saliendo sean con esas personas que creo que son coherentes y que admiro. Personas con las que hay una amistad y con las que ya estoy preparando
B: Has estado recorriendo España durante mucho tiempo con tus anteriores trabajos, ¿qué paradas tienes previstas con 'Adiós'?
I.R: Seguiré haciendo los conciertos que salgan pero no tengo idea de girar para presentar algo con esta situación... A lo mejor una recopilación antes del disco o alguna cosita... No lo sé, lo que tengo más en mente es meterme a grabar mis canciones y salir desde ese punto, pero en la industria todo puede cambiar y de repente surja esa oportunidad de hacer mas conciertos, así que tampoco me cierro a ello.
B: ¿Tienes ya alguna idea de con qué nos vas a sorprender después de 'Adiós'?
I.R: Hay más cosas que seguirán saliendo hasta marzo o abril, son Canciones para Curarme, canciones que quiero seguir tocando, presentando... Mi idea es que cuando saque lo nuevo, el tema de la pandemia esté más calmado y pueda hacer firmas y todas esas cosas que hacía antes, así que todavía va a tocar esperar un poquito. La idea es volver a empezar cuando todo sea un poco como antes.
B: En alguna ocasión has comentado que tu público es aquel que se centra en el mensaje que transmites, ¿sigues centrado en ese público o te vas abriendo a un público más general?
I.R: Yo me dirijo a la gente que quiere escuchar mis canciones y no pienso en qué tengo que hacer, por ejemplo, un TikTok para promocionar esto o lo otro. Sé que hay gente a la que le sale de forma natural hacerlo porque ya forma parte de su identidad, es algo propio de su generación, pero yo estaría mintiéndote porque a mí no me sale, lo que a mí me sale es coger la guitarra, darle dos guitarrazos y ponerme a cantar a pulmón abierto. Eso es lo que es Isma.
B: ¿Tuviste algún problema para desarrollarte profesionalmente al haber empezado tan joven en el mundo de la música?
I.R: He tenido muchos. He contado los céntimos de mi bote de ahorros para poder ir en Metro en Madrid. He llegado a ese punto de tener muy poco dinero, por no decir que a veces he tenido cero euros. He tocado por 20 euros... auténticas animaladas como irme a tocar a miles de kilómetros para no ganar absolutamente nada, dormir en habitaciones con arañas, con cucarachas... He tenido que tragar mucho porque, al final, nadie me ha regalado nada. Salí de mi pueblo, de Benetúser, con 18 años y me he currado todo esto desde abajo, como se ha hecho toda la vida en el rock y como he tenido que hacerlo, acorde a mis circunstancias.
Ha habido muchos sacrificios, también con mis padres, que me han ayudado todo lo que han podido porque quería estar centrado las 24 horas del día en la música, y al final he conseguido vivir durante toda mi vida de la música, primero malvivido, luego sobrevivido y ahora he conseguido vivir de la música... Dando clases, teniendo ganas de versiones con amigos... Todo el dinero que me entraba era de la música, lo que ha cambiado ahora es que tengo más estabilidad, después de más de 10 años. Aún así, estoy muy contento con todo lo que he vivido porque me ha servido para ser quien soy y llegar a donde estoy, los aciertos y los errores, porque al final la vida es eso.
B: ¿Qué consejo le darías a la gente que sabe que tiene talento, pero no se atreve a lanzar sus obras?
I.R: Que fallen mucho y aprendan a vivir en el fallo, ser amigo de los errores porque al final esto no es un camino de flores ni un cuento de alfombras rojas. Esta es una carrera como cualquier otra en la que puedes tener un momento de mayor visibilidad, pero en el que al final tú cierras la puerta de tu casa y tienes tus problemas. Existe un factor suerte, pero también tienes que buscarlo... O te lo curras y peleas o no haces nada. Tienes que ser autocrítico o te conviertes en un pringado.
B: La música ocupa gran parte de tu tiempo, pero ¿qué otras pasiones tienen Isma Romero?
I.R: Me encanta cocinar, estar con mi familia, con mi novia... Me encantaría tener una familia y que no todo sea la música, sino también tener tiempo mental para dedicárselo a mi gente y hacer otras cosas... Al final, cuando en cualquier aspecto o condición te inundas tanto, acabas como un loco y tienes que poner límites para decir yo quiero ser mejor, voy a seguir mejorando, pero también quiero desarrollar otras áreas de mi vida y no ser solamente un pesado que habla de música.. Yo creo que al final cocinar o tener otros hobbies, porque al final la música es un hobbie, el amor hacia los animales, te hace conectar contigo y con otras cosas. La psicología, el yoga, la meditación también me apasionan, si no te enriqueces de otras cosas no puedes contar nada. Si no tienes los pies en la tierra, acabas convirtiéndote en un escaparate, tú puedes tener un estilo pero saber dejarlo en un punto, conocer los límites entre tu trabajo y tu persona. Soy muchas cosas, no solo el artista.
B: ¿Qué le dirías a la gente que aún no te conoce para que escuchen tus trabajos?
I.R: Pues que si necesitan alguna canción para curarse, pueden pegar alguna escuchada a cualquiera de mis canciones de estantería.