Albañil de profesión, el joven cántabro que se presentó a la primera edición del talent show de TVE, tenía el sueño de convertirse en cantante y se hizo realidad. Entonces, Bustamante apenas tenía 19 años y lucía el típico estilo de cualquier otro chico de su edad en la década de los dos mil.
Con un pelo cortado a tazón, que normalmente peinaba hacia atrás, podíamos verle cada semana en las galas de 'OT 1', donde además llevaba los estilismos típicos de la época: camisas llamativas, camisetas de manga larga con brillos, teñidas, camisetas sin mangas con las que lucía su gran tatuaje en el brazo, así como también llevaba dos pequeños pendientes de aro en una oreja.
De esta guisa pudimos verle en su primer disco homónimo 'Bustamante' (2002), donde el artidta seguía con la misma apariencia que en la famosa Academia. Sin embargo, un año más tarde, el cantante mostró un look totalmente renovado para su disco 'Así soy yo' (2003), donde comenzó a hacer uso del traje y se cortó el pelo de punta.
Dos años más tarde llegaría 'Caricias al alma' (2005), su tercer álbum, donde el de San Vicente de la Barquera está irreconocible tanto si lo comparamos con su imagen anterior, como con la posterior. En esta etapa, Bustamante cogió algunos kilos y llevaba una larga melena que a veces recogía en una coleta.
Fue a partir de entonces cuando el estilismo del cántabro podría definirse como arreglado, pero informal, combinando camisas y americanas con vaqueros, así como chupas de cuero, camisetas y chalecos con pantalones algo acampanados. Además, durante esta época, Bustamante comenzó a ponerse cada vez más en forma gracias al deporte y a la vida sana que tanto le gusta.
El cantante ha experimentado una gran evolución en su estilo
Su estilo a la hora de vestir, cada vez más formal y refinado, se comenzó a ver reflejado en su disco 'Al filo de la irrealidad' (2007), donde comienza a mostrar una imagen más sobria y madura que también se refleja en el estilo hacia el que comenzó a virar su música, acercándose más a los intérpretes de toda la vida que a las canciones más poperas de sus inicios.
Este nuevo giro en su cuidada nueva imagen se confirmó años después con la llegada de sus siguientes álbumes 'A contracorriente' (2010) y 'Mío' (2011), donde Bustamante muestra la mejor versión de sí mismo, que ha mantenido desde entonces hasta la actualidad. En cuanto a su melena, el triunfito tampoco ha cambiado mucho de look, ya que suele peinarse con tupé.
En esta etapa, Bustamante sorprendió con una figura escultural muy trabajada en el gimnasio. Y para acompañar su nueva apariencia física, el cantante apostó por un estilo mucho más formal sobre el escenario y looks llenos de tendencias en su vida personal, vistiendo casi siempre prendas grises y oscuras, tal y como puede verse en la época de 'Vivir' (2014), su octavo disco de estudio.
En su último disco, 'Amor de los dos' (2016), Bustamante ha dado un paso más en la evolución lógica de su imagen, apostando por unos looks mucho más clásicos, sobre todo en sus actuaciones, donde predominan los trajes de chaqueta y chalecos, aportando un toque de color a los looks más sombríos de antaño, con conjuntos azules y camisa blanca.