Solo con ver la tremenda cola de fans que esperaban a las puertas de la mítica sala Joy Eslava de Madrid se podía empezar a presagiar el éxito rotundo que iba a ser el concierto de Alfred García. Efectivamente, así fue, y tan solo hacía falta ver las caras de todos y todas las allí presentes para darse cuenta de que el concierto estaba siendo absolutamente espectacular.
Con la sala a reventar, Alfred García aparecía sobre el escenario con unas ganas tremendas de comerse el escenario como él sabe hacer y lo hizo con un look de lo más rockero y su propio vestuario de gira con el número '1016' bordado en la chaqueta. La música era una auténtica pasada y, compaginada con los efectos de luces que utilizaron quedó un concierto redondo.
El piano fue uno de los elementos centrales de la puesta escena, puesto que imitaba a un volcán en constante erupción y le daba una vida al escenario que llamaba mucho la atención. Cantó todas las canciones que se esperaban y, mientras que se podía pensar que se guardaría sus dos hits 'De la tierra hasta Marte' o 'Que nos sigan las luces' para el final, nada más lejos de la realidad.
Estos temas estuvieron en el medio del concierto llenando de energía a los allí presentes, que no dudaban en saltar y gritarle todo tipo de halagos durante las dos horas de música en directo que ofreció el cantante. Viendo su profesionalidad y el espectáculo tan medido que dio a sus fans, nadie podría imaginar que hace tan solo un año estaba en la academia de 'OT 2017' intentando buscarse un hueco en el mundo de la música.
Una estrella de rock absoluta
Si bien es cierto que en algunas ocasiones se vino muy arriba en su actuación sobre el escenario, lo que demuestra es que tiene claras reminiscencias de estrellas del rock a las que admira. En varias ocasiones, el cantante se bajó entre el público a cantar con ellos, también lanzó una botella de agua a las fans de la parte de abajo que cogieron entre gritos e ilusión e, incluso, subió a una joven al escenario para que se sentase con él al piano mientras cantaba un trocito de una de sus canciones.
El cantante se subió en varias ocasiones al piano y disfrutó de todo lo que allí se estaba viviendo. Joe Pérez Orive se subió al escenario para tocar la guitarra en una de las canciones, así como Rayden en el primer concierto y Carlos Sadness, en el segundo. Alfred García se cambió incluso de ropa a mitad de concierto y, cuando se creía que todo había terminado, volvió a cantar unos temas de lo más bonitos que han marcado su carrera como 'Vete de mí' y 'Amar pelos dois'.
Grandes apoyos
Entre las gradas hubo muchos rostros conocidos que no se quisieron perder el espectáculo, sobre todo grandes amigos que ha hecho gracias a 'OT 2017'. Cepeda, Roi Méndez, Ricky Merino, Marina Jade y Manuel Martos acudieron al primer concierto, así como Elena Rivera entre otros; mientras que en el segundo estuvieron Raoul Vázquez, Alba Reche, Itziar Castro y Nerea Rodríguez, con la que se vivió uno de los momentos más especiales.
El joven le dedicó la canción 'Madrid' en la que dice "Nerea cantando en el musical", por lo que se pudo ver como la cantante se secaba incluso una lágrima al vivir un momento tan bonito. Finalmente el concierto terminó con un estallido de confetis y serpentinas y cantando un trocito del himno del Prat ya con las luces encendidas. Sin lugar a dudas el concierto de Alfred García se podría definir como un espectáculo absoluto de una estrella de rock que quiere alcanzar el éxito y que está a punto de hacerlo.