Como cada gala que se precie, todas las celebrities que cuentan con invitación buscan looks con los que llegar a la alfombra roja y arrasara ante la hondonada de flashes de los medios allí presentes. Y para esta edición de los Video Music Awards de la cadena musical MTV no iba a ser menos. Hasta el pleno centro de la ciudad de Nueva York se desplazaron grandes rostros tanto del mundo de la música como de otros círculos de alto nivel como la moda. Pero desgraciadamente, aunque la música era la gran protagonista del evento, en la alfombra roja lo que acaparó toda la atención fueron los looks de algunas de las asistentes.
Una de las primeras en llegar fue una de las estrellas de la noche, Cardi B, que por aquel entonces lo hacía con diez nominaciones bajo el brazo (aunque desgraciadamente solo se llevo tres de estatuillas). Para la ocasión la del Bronx escogió un look elegante que poco tiene que ver con su estilo musical. Firmado por Alexander Acosta, la cantante se decantó por un diseño que además cuenta con la etiqueta de 'Moda Sostenible'.
Salvables fueron también los looks de otras de las nominadas de la noche. JLo, que llegaba de la mano de su "alma gemela", Álex Rodríguez, no dudó en aprovechar la ocasión para demostrar a las nuevas generaciones como la 'vieja escuela' sigue teniendo sus trucos para ganarse toda la atención. Con un Versace plateado, la americana posó al más puro estilo Angelina Jolie asomando la pierna por una abertura lateral de límites insospechados. Camila Cabello, que inició su andadura en solitario hace apenas 2 años, se decantó por un Oscar de la Renta de corte clásico.
Especial mención también para una de las más esperadas de la noche, Kylie Jenner, que quiso estar junto al padre de su hija, Travis Scott, en una noche en la podría haberse llevado un premio (pero no) y a pesar de que en la alfombra roja posaron por separado. Y tras haber sido reconocida como la mujer multimillonaria más joven hecha así misma por la revista Forber, la pequeña del clan Kardashian-Jenner lució un vestido estilo americana en color blanco con, por supuesto, un cinturón que resaltaba el cuerpo Kardashian que ha logrado recuperar a la perfección tras haber dado a luz el pasado mes de enero. También como foránea al mundo de la música la modelo y recién prometida, Karlie Kloss, no quiso perderse la gran noche y para ello escogió un Elie Saab plateado y con mucho brillo (haciendo competencia a JLo) con dos aberturas de vértigo por donde lució sus kilométricas piernas.
Los horrores de la noche
Y, como no, la alfombra roja también tuvo varias competidoras para llevarse el título de 'Peor vestida'. Y fue una dura batalla. Entre las más discretitas (por así decirlo) llegó Blake Lively con un traje dos piezas blanco de raso (que le ayudó a deslumbrar) firmado por Ralph and Russo. Poco después llegó la recién estrenada en los 60 años, Madonna, con un estilismo que recordaba a sus looks de los primeros 2000 cuando se volvió gótica con referencias hindús. Aunque el vestido que lucía era negro, todo lo que decidió ponele por encima no tenía desperdicio: un impresionante collar (o collares, no está del todo claro), una corona con unas tachuelas enormes y un kimono estampado que poco tenía que envidiarle a los llamativos abalorios.
Y de mucha tela a muy poca. Rita Ora, vestida por Jean Paul Gaultier, dejó muy poco a la imaginación con un vestido con trasparencias que dejaba a la vista tanto sus tatuajes como la ropa interior. En la misma línea llegó Blac Chyna (que esa misma noche se encontraría con su excuñada y enemiga número 1, Kylie Jenner) con un dos piezas compuesto de cadenas que, a pesar de cubrir sus hombros, la cantidad de 'tela' brillaba por su ausencia. Pero sin duda el premio de la noche se lo llevó Amber Rose que se presentó al evento nada más y nada menos que disfrazada de Dominatrix con un corsé rojo de charol a juego con un antifaz con orejas de gato, medias de rejilla y botas altas.
Ellos, los eternos secundarios
Y en una alfombra donde ellas lucharon por alzarse con el título de 'Mejor vestida', una vez más los otros grandes protagonista de la noche pasaron por allí casi sin pena ni gloria. Los que decidieron no llamar la ateción como Shawn Mendes y Liam Payne escogieron trajes sencillos. Pero, por supuesto, también hubo quien decidió convertirse en el centro de atención. Y ese fue sin duda Maluma. El latino, que además sería ya protagonista también durante la gala con su actuación musical, apareció sobre la red carpet con un traje blanco que no iba acompañado por una camisa dejando entrever el cuerpo del que tanto hace gala en sus redes sociales.