El rotundo éxito que tuvo la serie literaria de 'Crepúsculo' solo fue el preámbulo del revuelo que generaría la adaptación cinematográfica del primer libro homónimo en 2008. Una película independiente que pronto daría lugar a toda una saga de cinco entregas, donde todo el peso de la fama recayó en sus dos protagonistas: Kristen Stewart y Robert Pattinson.
No solo porque las estrellas de la saga se convirtieran en celebrities muy celosas su vida personal, ya que la historia de amor de sus personajes traspasó la pantalla provocando aún más expectación, sino porque además, al igual que ocurre en otras sagas de cine adolescente con varias entregas, Pattinson y Stewart temían encasillarse, tanto en su profesión como actores, como en lo que respecta a su imagen, altamente asociada al atractivo vampiro y su amada.
Adiós a Edward Cullen y Bella Swan
Durante cuatro años, Kristen Stewart tuvo que mantener el look adolescente de la joven Bella Swan, una apariencia que afectaba directamente a su melena, que tuvo que mantener intacta durante aquella etapa. Por ello, tras finalizar el rodaje de 'Amanecer: Parte 2', la actriz, de 25 años, tuvo más libertad a la hora de crear su propio estilo, que siempre ha sido más bien desenfadado e informal y ha llevado el pelo corto o teñido de otros colores durante varios períodos.
Por su parte, el admirado protagonista de estas cintas de vampiros, de 29 años, también quiso distanciarse de su imagen de Edward Cullen a partir de 2012, por ejemplo, dejándose barba. Entonces, además de acabar la historia de amor de su personaje en la ficción, terminó la suya propia después de que Kristen Stewart le fuese infiel con Rupert Sanders, su director en la película 'Blancanieves y el cazador'. Sin duda un punto de inflexión en la vida delos actores que se notó tanto por dentro como por fuera.