Siempre es triste tener que hablar de la muerte de alguien joven, pero lo es todavía más cuando la persona en cuestión tenía una prometedora carrera por delante. El 22 de enero moría a los 28 años el actor australiano Heath Ledger, y de esa fecha han pasado ya cinco años.
A los dieciséis años se mudó con su mejor amigo a Sidney para comenzar a cumplir su sueño de ser actor, que comenzó en 1992 con su primer papel en una serie de televisión. Gracias a su participación en la comedia adolescente '10 razones para odiarte' comenzó a hacerse un hueco en el complicado mundo de Hollywood.
A partir de ese momento fue compaginando papeles en producciones comerciales ('Destino de caballero', 'Casanova') con otras de un corte más independiente ('El patriota', 'Monster's Ball', 'Candy'). Con su papel en la polémica cinta de temática homosexual 'Brokeback Mountain' conseguiría su primera nominación al Oscar. Pero fue interpretando al Joker en 'El Caballero Oscuro' de Christopher Nolan cuando alcanzaría la preciada estatuilla, aunque fuera póstumo.
Ledger ha sido relacionado con un buen número de caras conocidas en el plano sentimental. Ya desde '10 razones para odiarte' se habló que su compañera de reparto Julia Stiles y él mantuvieron una relación que duró varios años. Menos de un año duró con Heather Graham, quien prometió que no volvería a comenzar una relación con uno de sus compañeros de reparto. A pesar de la diferencia de edad, también salió dos años con Naomi Watts tras coincidir en 'Ned Kelly', e incluso vivieron juntos.
Misteriosa muerte
Precisamente Olsen fue la persona con la que intentó contactar la masajista del intérprete cuando le encontró en la habitación. Era 22 de enero de 2008, y Ledger fue encontrado inconsciente en su apartamento de Manhattan. A pesar de los intentos de reanimarle, fue inútil. La posterior autopsia e investigación llegó a la conclusión de que la causa de la muerte fue una "sobredosis accidental de medicamentos" para la ansiedad o el insomnio, descartando el suicidio. Mary-Kate Olsen fue acusada por los paparazzi de ser la proveedora de las medicinas que encontraron en la casa del actor, algo que tanto ella como sus representantes han desmentido en varias ocasiones.
Su misteriosa muerte no hizo más que acrecentar la notoriedad del último gran personaje de su carrera, el Joker. Según el propio Ledger, esa interpretación, junto con la de 'I'm Not There', le habían pasado tanta factura que ya no podía dormir más de dos horas seguidas. Su fallecimiento pilló desprevenido al equipo de 'El imaginario del Doctor Parnassus', película que se encontraba rodando. Decidieron rendir homenaje al actor terminando la producción, aprovechando que su personaje tenía varias identidades ficticias, que fueron interpretadas por Johnny Depp, Colin Farrell y Jude Law.
Sus restos descansan en su Perth natal, donde han nombrado a un cine en su honor. Tanto sus compañeros de profesión como los críticos coincidían en augurar una gran carrera para el talentoso actor, pero sólo nos quedará el recuerdo en su filmografía.