La actriz española deja clara su postura respecto a las desigualdades de género que existen en la industria cinematográfica y en la sociedad en genera.
Sin duda Penélope Cruz se ha convertido en la actriz española más famosa de la industria cinematográfica internacional. Sus numerosos trabajos en las producciones de Hollywood son posiblemente el mejor reflejo de su éxito profesional, pero la madrileña se deja ver también en el panorama fílmico nacional. Ahora, la célebre intérprete sorprende con unas declaraciones que dejan más que clara la opinión que le merece el machismo de nuestra sociedad.
En una entrevista concedida a la revista Porter Edit, la actriz ha dejado clara su postura respecto al machismo en base al que se han creado los cuentos infantiles y los valores que estos transmiten. La ganadora de un Oscar afirma que siempre que le lee a sus hijos una de estas obras de literatura infantil, procura modificarles el final y darle un giro para que el mensaje que estos reciban sea otro más tolerante. "Que le jodan a Cenicienta y a la Bella Durmiente", eran las palabras tajantes que dejaban a muchos boquiabiertos.Siguió insistiendo en el hecho de que se permite cambiar los desenlaces de las historias con el objetivo de que sus hijos reciban una educación basada en la tolerancia y la libertad. "Hay mucho machismo en esas historias y eso puede tener un efecto en la forma en la que los niños ven el mundo", insistía sobre el hecho de que hay que mostrar a los más pequeños que todos somos iguales dentro de la sociedad, independientemente de nuestro género o cualquier otra característica que nos defina.
Una nueva industria
Penélope Cruz ha tenido tiempo para tratar otros temas relacionados con el machismo. Principalmente mostró abiertamente su opinión acerca de lo que estaba ocurriendo dentro de Hollywood gracias al movimiento #MeToo, del que muchas mujeres forman parte. "Tiene que cambiar las reglas de nuestra industria y de las demás industrias en las que las mujeres están siendo reprimidas", dijo para referirse al trato desigual que reciben las mujeres respecto a los hombres dentro del cine.