A sus 55 años, José Coronado cuenta con una dilatada trayectoria en teatro, cine y televisión que no para de crecer. Aunque ha trabajado más en cine, no olvida la importancia que el teatro tiene en su profesión, pues recuerda que subirse a las tablas es la fuente del actor. Además, en el teatro el periodo de construcción del personaje es mayor que en el cine, lo que no ha ocurrido en el caso de 'El Cuerpo', su última película.
Jaime Peña, un personaje con muchas vueltas
"Leyendo el guión decía, ¿pero esto qué es?, ¿dónde desemboca esto?; 'El Cuerpo' es sorpresiva, y luego también rodándola se han dado todavía más vueltas, y luego montándola aún más, y al final es una película tremendamente entretenida y sorprendente", apunta José Coronado, que se ha mostrado encantado con los actores con quienes ha tenido que trabajar, sobre todo con Belén Rueda, con quien no coincidía desde 'Periodistas', y con Hugo Silva, de quien dice que ha aprendido a escuchar, "porque es un actor de los que mejor escuchan, y de los que mejor miran".
El actor confiesa que se ha enamorado de Oriol Paulo, director de 'El Cuerpo' que desplegó sus métodos en su ópera prima, uno de los cuales fue poner música a los actores para influir en su estado de ánimo para el rodaje: "A mí me puso una de Leonard Cohen, no recuerdo el nombre de la canción, pero era fantástica; era la voz rota de un hombre solitario, y ese era mi personaje".
La interpretación, el privilegio de vivir otras vidas
José Coronado afirma que no escoge los papeles en función de si le va servir para avanzar en su carrera, sino que todo depende de si el personaje "va a hacer una buena historia. Lo que buscas es dar lo máximo de ti, y cuando hay además material para hacerlo, como en los personajes que teníamos en 'El Cuerpo, es en lo que pensamos".
Su carrera es larga, y a lo largo de la misma ha interpretado a numerosos y muy diversos personajes; a pesar de ello no sueña con dar vida a uno u otro, sino que sueña con el que tiene que interpretar mañana, porque "es de la única forma en la que tu salud mental puede aguantar esta profesión en la que intervienen tanto el azar y las circunstancias".
En referencia a su profesión de actor, José Coronado se muestra rotundo: "Es el privilegio de vivir otras vidas en base a lo que tú quieras bucear y estudiar esas otras vidas. Vives otras vidas que te enriquecen personalmente; y luego que es una profesión con ausencia de monotonía total, que eso es un lujazo en estos tiempos, que si te gusta y encima puedes vivir dignamente de ello y llenar la nevera, pues qué más podemos pedir".
José Coronado defiende el cine español
No duda en abordar los estigmas que todavía hoy, aunque ya en menor medida, arrastra el cine español; la respuesta de Coronado es clara, se critica porque "uno de los pecados nacionales es hundirnos. Antes el cine español podía estar buscando su sitio, pero desde hace unos años lo hemos encontrado, y además universalmente, y donde nos falta ser más reconocidos es precisamente en nuestro país".
Tanto apuesta por el cine español que incluso responde que "hacemos películas de genéro que superan a muchas americanas, porque lo que no tenemos de dinero y no podemos meter de efectos especiales lo suplimos con historias en las que hay emoción y en las que hay personajes".
A pesar de que José Coronado es el flamante ganador del Goya a Mejor Actor en la pasada edición de estos galardones por su papel de Santos Trinidad en 'No habrá paz para los malvados', los premios no le quitan el sueño: "Lo mejor es el trabajo, lo demás son guindas. Sirve más para las familias, para que disfruten ellos, porque tu lo que quieres es ponerte con lo siguiente, ese es el premio".