La XXXIV edición de los Premios Goya dieron comienzo con una actuación musical. Una vez terminó llegó el momento de la entrega de los galardones. La primera categoría ha sido la de Mejor Actriz Revelación, que ha ido a parar para Benedicta Sánchez por 'O que arde'.
A sus 84 años, la intérprete subió al escenario del Palacio de los Deportes José María Martín Carpena de Málaga para recoger su merecido galardón. Muy emocionada, casi no podía articular palabra.
El discurso de Benedicta Sánchez
"La vida te da sorpresas. Esta es una muy grande en mi larga existencia. Gracias. Es infinito las personas a la que quería dedicar el Goya. A mis padres, que permitieron que esté aquí, que haya nacido. A mi hija, que me llevó al casting. A Oliver Laxe y su equipo, no creo que haya princesa que le hayan dado un trato tan maravilloso como me dieron ellos ", continuó.
"Gracias por concedérmelo, por ellos, por mi tierra chica, Galicia. Me faltan palabras, familiares, políticos y de sangre, y bueno... ayúdenme", dijo al público. "Díganme cosas para que pueda decirlas porque me quedo enmudecida". En ese momento pronunció unas palabras en gallego, "mi tierra meiga".
Antes de continuar hizo un guiño a Málaga al decir con una sonrisa "me siento muy perita" (quiere decir que se siente muy guay). También lanzó un mensaje de amor a su hija y a sus nietos: "Que no se olviden de la yaya, que les quiere mucho".