Tras viajar por medio mundo para presentar su última película, 'El Gato con Botas', Antonio Banderas y Salma Hayek se desplazaron al Village Theatre de Los Angeles para la premiere de este filme.
Rodeados de una gran expectación, la pareja hizo las delicias de los allí presentes y mostró su gran química ante las cámaras. Ambos actores posaron con los dos gatos gigantes, Gato con Botas y Kitty Softpaws y derrocharon simpatía, sobre todo Banderas, que se arrancó por bulerías con una guitarra española.
Salma Hayek se lleva al 'Gato con Botas' a su hija Valentina
El malagueño contó con la presencia de su inseparable mujer, Melanie Griffith, quien volverá a la interpretación en noviembre, fecha en la que grabará un piloto para un proyecto de televisión. Por su parte, la mexicana se llevó con ella a su hija Valentina, de 4 años, nacida de su matrimonio con el empresario François-Henri Pinault.
Asimismo, para disfrutar de 'El Gato con Botas', estuvieron otras caras conocidas como Jeffrey Katzenberg, Billy Bob Thornton, Travis Barker, Sharon Leal, Zach Galifianakis, Constance Marie, Carlon Jeffery, Robyn Lively, Katherine McNamara, Pia Mia, Ashley Argota y Bella Thorne, entre otros.
Esta cinta, que llegará a los cines estadounidenses el 28 de octubre, está dirigida por Chris Miller y producida por Dreamworks y narra la historia del famoso Gato con Botas, a quien da voz Antonio Banderas, mientras que Salma Hayek ha doblado a una gata ladrona que se une al Gato con Botas, Kitty Softpaws.
Antonio Banderas, anfitrión de una gala latina de apoyo a Obama
El actor, muy atareado últimamente con las promociones de 'La piel que habito' y de 'El Gato con Botas', ha sacado tiempo para organizar la primera gala latina para recaudar fondos para la reelección de Barack Obama en 2012.
Así, el español y su esposa prestan su casa de Hancock Park, en Los Angeles, para esta fiesta que tendrá lugar este lunes 24 de octubre a partir de las 18:00 horas que lleva el nombre de 'Obama Victory Fund 2012' y que contará con la presencia de Eva Longoria y del propio presidente en un evento que cuesta entre 5.000 a 35.800 dólares.