De hecho, hoy se hablará de otra pareja de inseparables que se han llegado a convertirse en uña y carne con el paso de los años. Se trata de Ben Affleck y Matt Damon, dos pedazo de actores que iniciaron a la vez su carrera al estrellato, y aunque al final cada uno de ellos tomó caminos diferentes, los dos han sabido mantenerse unidos y fieles a sus colegas. Se conocieron cuando todavía estaban cursando sus estudios en primaria, en Cambridge, Massachusetts, y su deseo mutuo de convertirse en estrellas les llevó a tomar las mismas clases de interpretación y a forjar una muy buena amistad. Sin embargo, los niños pequeños se convirtieron en jóvenes adultos que tenían que decirse adiós para emprender nuevos proyectos por separado.
Así, mientras que Damon se quedo en su ciudad natal para empezar a estudiar en la prestigiosa Universidad de Harvard, Affleck se mudó al apartamento de su hermano Casey en Los Ángeles para empezar a probar suerte en el complicado mundo del espectáculo. Sin embargo, la vida no tardaría mucho en volver a juntarlos, y es que, a pesar de que al rubio le salían algunos papeles en películas de poca importancia que le permitían compaginar su pasión con su carrera, finalmente decidió abandonar su licenciatura para trasladarse junto a su amigo y seguir sus pasos. De este modo, no era extraño ver a esta versión americana de Zipi y Zape en cada casting que se anunciaba en los periódicos, guardando la esperanza de que algún día conseguirían cumplir su sueño.
Y ese día llegó...
El inesperado secreto de su amistad
Lo cierto es que su vínculo es tan fuerte que ha logrado sobrevivir al paso de más de tres décadas, y los dos actores siguen siendo tan colegas como cuando se conocieron en los años 80. Por eso, son muchos los que se preguntan cómo lo hacen para no desgastarse o para no sucumbir a los problemas que suelen azotar a los colegas cuando han pasado por tantos momentos juntos. Ben Affleck lo tiene claro: "Bueno, la verdad es que Matt Damon y yo hemos disfrutado de unas relaciones sexuales maravillosas. Y eso es lo que mantiene nuestra amistad tan viva como el primer día", bromeaba durante una entrevista en 'Entertainment Weekly'. En un tono más serio, el intérprete explicó que, a pesar de sus apretadas agendas de superestrellas, siempre intentan sacar un hueco para verse y ponerse al día.
Sin embargo, parece que a Damon no le hace tanta gracia eso de que se bromee sobre un supuesto affaire entre ambos, y es que durante un tiempo fueron muchas la voces que se alzaron para insinuar que ambos podrían ser gays, algo que sacó de quicio al rubiales de la pareja. "Me parece ofensivo. Creo que debe de ser muy difícil para los actores decirlo públicamente. Pero en términos profesionales, creo que eres mejor actor cuanto menos sepan de ti. Punto. Y la sexualidad es una parte importante. Seas heterosexual o gay, la gente no debería saber nada de tu sexualidad porque es uno de los misterios con los que deberías poder jugar", explicaba.
En las buenas, y en las malas
Por desgracia, ser una estrella de Hollywood puede acarrear consecuencias desastrosas y la fama le acabó pasando factura a Affleck, que tuvo que ser ingresado en un centro de rehabilitación hasta en tres ocasiones para curarse de su adicción al alcohol. Menos mal que el actor cuenta con un amigo incondicional que lo apoyó en todas y cada una de sus recaídas, Matt Damon, que "siempre ha estado y estará ahí para Ben", recalcó el representante del actor.
Una prueba más de que su amistad es a prueba de malos momentos y de que ninguno de ellos piensa tirar la toalla o dejar de lado a su colega aunque las cosas se pongan feas, porque ambos han llegado a experimentar con el otro esa maravillosa sensación por la que se dieron cuenta de que, desde hace mucho tiempo, su BFF dejó de ser tan solo un amigo para convertirse en un miembro más de su familia.