Trabajar en equipo no es algo fácil y sino que se lo digan a grandes industrias como la del cine. Cada uno somos de nuestro padre y de nuestra madre y no siempre gusta la manera que tienen de trabajar nuestros compañeros. Por eso, lo más ideal es llegar a un punto intermedio, ser profesional, amoldarse e intentar ceder en las peticiones de aquellos que colaboran con nosotros. En todos los puestos y oficinas suelen aparecer pequeños problemas o rencillas que se solucionan con facilidad pero no siempre pasa así.
Un claro ejemplo sucede en Hollywood. El equipo técnico compuesto por maquilladores, peluqueros, cámaras, sonido, regidores, productores, guionistas y directores suelen soportar las exigencias de las estrellas. Algunos de ellos no suelen hacer peticiones fuera de lo normal pero, en cambio, hay otros intérpretes que consiguen que la paciencia de todos sus compañeros se agoten por culpa de su excéntricas exigencias y sus continuas salidas de tono. Por eso, recapitulamos los actores con los que nadie de la industria del cine quiere trabajar.
Actores más odiados
1 Lindsay Lohan : Comenzó a despuntar en el mundo del séptimo arte gracias a su papel como protagonista en la mítica película 'Tú a Londres y yo a California'. Desde ese momento, la pequeña Lohan se convertía en un ídolo de masas que no supo gestionar bien todo lo que le estaba pasando. Por todos son conocidos los problemas que ha tenido con el mundo de las drogas, el alcohol y la justicia pero aunque parezca poco todo esto no queda aquí.
Además de sus adicciones, Lindsay Lohan cosecha fama de tener mal carácter y de ser una persona bastante caprichosa y déspota. Fue el mismo Paul Schrader, director del film 'The Canyons', el que confirmó a la propia prensa lo difícil que había sido trabajar con ella en el set de rodaje: "he sido rehén de Lindsay durante 16 meses". Además, él no ha sido el único ya que varios trabajadores de la serie 'Anger Management' confirmaban que la neoyorquina se negaba a salir de su camerino, salía a trabajar cuando a ella le daba la gana haciendo esperar a todo el equipo y que se marchaba cuando se sentía cansada.
2 Teri Hatcher : Ella también ha cosechado mala fama. La actriz lleva trabajando desde el año 1985 cuando interpretaba a Amy en la serie 'The Love Boat'. Desde ese momento, los papeles no le han dejado de llover y ha protagonizado ficciones tan famosas como 'Lois & Clark: The New Adventures of Superman' y 'Mujeres Desesperadas'. Fue en esta última cuando se ganó toda la mala reputación que todavía recae sobre sus espaldas.
En esta comedia que tanto enganchó al público, la intérprete siempre llegaba tarde al rodaje, hablaba mal a sus compañeros y consiguió alejarse de todos ellos. Hasta tal punto llegó el mal rollo que su compañera de reparto Nicolette Sheridan confesó que era "la persona más cruel" que jamás había conocido. Estos no son los únicos rumores que vinculan a Teri Hatcher con la falta de profesionalidad y es que en el rodaje de 'El mañana nunca muere', película de la saga de James Bond, el propio Pierce Brosnan se quejó en varias ocasiones por las salidas de tono de su compañera.
3 Bruce Willis : El primer papel que consiguió el americano en el mundo del séptimo arte le llegó en 1980. Desde ese momento, el intérprete no ha dejado de trabajar llegando a interpretar más de cuarenta películas. Durante todos estos trabajos, Bruce Willis ha cosechado mala fama debido a su fuerte carácter.
Es más, son bastante los rumores que afirman que además de trabajar como actor durante los largos rodajes el intérprete se empeña en dirigir los largometrajes y hace caso omiso a sus directores. El creador de la película 'Cop Out', Kenvin Smith, aseguró durante una entrevista que trabajar con Bruce Willis le " mató el espíritu " durante los meses que duró el rodaje.
4 Russell Crowe : Otro que no cosecha buena fama en el mundo de Hollywood es el director y actor neozelandés Russell Crowe. Él mismo ha reconocido que tiene un fuerte carácter y que muchas veces puede llegar a perder los nervios pero se ha llegado a rumorear que durante el rodaje de 'Gladiator' no se dirigía la palabra con ninguno de los productores del largometraje.
Hasta tal punto llegó la tensión que corre la leyenda urbana que el intérprete llamó el mitad de la noche a uno de ellos para amenazarle de muerte. Su temperamento le ha jugado malas pasadas, tan solo hay que recordar el momento en el que en público habló mal de su compañero George Clooney. El ganador de un Oscar afirmó que su colega era "un vendido" por aparecer en anuncios publicitarios.
5 Katherine Heigl : Ha estado trabajando en la industria desde el año 1992 pero su papel más conocido le llegó en 2005 cuando interpretó a la Doctora Izzie Stevens en 'Anatomía de Grey'. Durante los cinco años que estuvo en la serie dirigida por Shonda Rimes los rumores que afirmaban que tenía un carácter de diva ocuparon muchos titulares. Todo se confirmó cuando en 2010 abandonó la serie y la propia actriz despotricaba contra su antigua productora y jefa al afirmar que 'Anatomía de Grey' era una pésima serie y que sus tramas no valían ni un duro.
Sus desplantes y sus aires de superioridad en los sets de rodaje han dado mucho de que hablar. Una de las peleas más comentadas sucedió cuando Sofía Vergara se enfrentó a ella harta de escucharla quejarse del frío y le dio una reprimenda al más puro estilo latino. Todo esto no queda aquí y es que los trabajadores que han compartido tiempo con ella aseguran que Katherine Heigl hace peticiones sin sentido durante las horas de grabación y que entre toma y toma a lo único que se dedica es a criticar a sus compañeros.
6 Shannen Doherty : Tan solo ha tenido dos papeles que sean recordados en toda su trayectoria y de los dos ha salido por la puerta de atrás. En 'Sensación de vivir' fue despedida por sus jefes por el mal comportamiento que tenía con sus compañeros y por las continuas peleas que protagonizaba cada día. Cuatro años más tarde, le tocó ser una de las hermanas Halliwell y salvar al mundo de los temidos demonios y del mal. Parece ser que el terror lo causaba ella misma cuando llegaba a su puesto de trabajo.
Las malas lenguas aseguran que Shannen Doherty y Alyssa Milano se llevaban como el perro y el gato porque la primera estaba saliendo con el que hacía del novio de su compañera en la ficción. Los ataques de celos y las peleas eran continuos con sus compañeros que la dirección decidió despedirla cuando finalizó la tercera temporada. Por si fuera poco, corren los rumores que afirman que cuando se produjo este despido todo el equipo organizó una fiesta en la que había una pancarta con la frase " la bruja ha muerto ".
7 Charlie Sheen : Este es otro de los casos en el que el mundo de las adicciones puede arruinar por completo tu carrera profesional. El neoyorquino lleva trabajando en la industria del séptimo arte desde el año 1973 pero, sin lugar a dudas, si se le conoce por algo es por su papel en 'Dos Hombres y Medio' y por los escandalosos titulares que protagoniza. Durante los años que estuvo trabajando en el rodaje de esta ficción, el actor no hacía otra cosa que salir de fiesta, gastar grandes cantidades de dinero en sustancias poco recomendables y en acostarse con decenas de mujeres.
Viendo cómo estaba yendo el rumbo en la vida del intérprete, los productores decidieron hacer un largo parón en la serie para que Charlie Sheen pudiese rehabilitarse. Hubo varios intentos pero ninguno salió como se esperaba. Por eso, los directores de la comedia americana decidieron prescindir de su trabajo durante una larga temporada. Esta decisión no gustó nada al actor y en una de las ocasiones que salió de la clínica de rehabilitación no se le ocurrió una idea mejor que conceder una entrevista y poner a caer de un burro a los que habían sido sus compañeros. Al escuchar estas declaraciones, los productores y directores de 'Dos Hombres y Medio' decidieron despedirle de manera definitiva y no volver a saber nada más de él.
8 Mike Myers : Fue uno de los cómicos que más carcajadas consiguieron sacar al público a finales de la década de los noventa. Su momento de máximo apogeo sucedió cuando interpretó las tres películas de 'Austin Powers' pero todo quedó ahí ya que no supo gestionar demasiado bien su fama y su talento. Según cuentan los compañeros de trabajo que compartieron rodaje con él, el canadiense es bastante egoísta, déspota y egocéntrico.
Este comportamiento ha llevado a que los grandes directores de Hollywood no quieran trabajar con él para así evitar quebraderos de cabeza. Una de las anécdotas que más se han comentado en su carrera fue el arrebato que le entró por cambiar el acento de Shrek cuando se encontraba doblando la voz del personaje en las películas. Este caprichoso incoherente e inexplicable le costó a la productora nada más y nada menos que cinco millones de euros. Además, corre la leyenda que varias personas que trabajaban con él han tenido que ser despedidas por mirarle directamente a los ojos.