Yolanda Hadid ha hecho fuertes confesiones sobre la enfermedad que padece desde hace varios años en una recopilación de sus memorias para la revista People. La exmodelo ha confesado que pensó quitarse la vida debido a los grandes dolores que padecía, momento en que su enfermedad llegó a su punto más alto. Desde entonces, Hadid lucha contra esta enfermedad crónica de la que todavía no hay cura.
Yolanda Hadid ha revelado que fue durante un viaje a Florida con el que fuera su marido, David Foster, cuando se le pasó por la cabeza acabar con su vida: "Dios, por favor, llévame lejos en una ola. No puedo vivir un día más como este". Estos pensamientos llegó a tener Hadid, sin embargo, ha confesado en sus memorias que fue gracias a sus tres hijos que decidió seguir luchando.
La holandesa fue diagnosticada en 2012 de esta dolencia tras una infección que le detectó un médico en el cerebro. Hadid comenzó un tratamiento para recuperarse, sin embargo, su salud empeoró y los síntomas cada vez fueron más duros. La exmodelo empezó a sentirse cada vez más agotada y con más dolores hasta perder la habilidad de leer, escribir y ver la televisión, como reveló hace varios años en su blog personal.
Su situación fue tan cambiante que ha asegurado que, aunque intentó ser fuerte, no lo consiguió: "Soy una luchadora, pero me tuve que rendir". Tan dura era su situación que en uno de los peores momentos de la enfermedad la madre de Gigi Hadid tuvo que permanecer durante más de 22 horas en la cama porque no podía moverse.
Sus hijos son su gran apoyo
Desde que Yolanda Hadid fuera diagnosticada con la enfermedad, sus tres hijos no se han separado de ella y le han apoyado siempre. De hecho, fue gracias a ellos por lo que la exmodelo decidió ser fuerte y seguir luchando. Además, Gigi, Bella y Anwar le han ayudado a cambiar de vida y comenzar de nuevo tras su ruptura el año pasado con David Foster.