Yiya ya se encuentra de vuelta en España tras terminar su aventura como concursante de 'Supervivientes 2020'. Ahora, ya con el estómago llego y tras volver a la vida normal, la joven ha hecho balance de su tiempo en Honduras y ha confesado que lo más duro no es el hambre sino el aburrimiento y "la incapacidad de salir de su tormento" y que este hace que abrir "puertas que nunca hubieras querido y que ni siquiera saber que te atormentan".
Y fue precisamente en este proceso introspectivo en el que fue consciente del momento más complicado de su vida y el que, hasta ahora, todavía no había reconocido: "En esa soledad, le puse nombre y asumí que padecí anorexia desde los 12 a los 18 años ", asegura en una entrevista para la revista Lecturas: "Lo controlaba todo, viví". Tal y como confiesa, todo comenzó por un comentario desafortunado sobre su cuerpo: " Un tío mí me tocó la pierna y me dijo: 'Gruesota'. Esa Navidad adelgacé 8 kilos ".
José Antonio Avilés, Antonio Pavón y Yiya en la gala de estreno de 'Supervivientes 2020'Tras esto, empezaron otros comportamientos que denotaron este problema alimenticio: "Me servía comida y, cuando mi madre se iba a la cocina, la devolvía a la fuente. Manchaba el plato, si tenía comida en la boca hacía como que tosía y me limpiaba la boca y echaba la comida que tenía". La superviviente asegura que su mala forma de ocultar estos hechos hizo que su madre lo descubriese: "Me dejé sin tirar de la cadena la comida envuelta en un papel", confiesa: " Mis padres nunca quisieron llamarlo por su nombre, pensaban que era una tontería de la edad. Nunca fue una tontería de la edad. Era totalmente inhumano, una gran autodestrucción ".
Contra Ana María Aldón y Rocío Flores
Más allá de esto, Yiya no dudó en hacer un repaso por tiempo en 'Supervivientes 2020' y dejar claro qué piensa de sus compañeros tras la convivencia. De Ana María Aldón, a pesar de sus idas y venida, asegura que " es una folclórica frustrada y tiene un afán de protagonismo superlativo ", lo que hace que " es muy egoísta y avariciosa ", lo que hace totalmente comprensible "la decepción que ha sufrido Rocío Flores".
Yiya, Ana María Aldón y Rocío Flores en la gala de estreno de 'Supervivientes 2020'Y aunque con la hija de Antonio David Flores terminó de manera amistosa el concurso tras haberse convertido en su peor pesadilla (llegó incluso a ser nominada disciplinariamente por llamarle "morsa"), no ha duda en contar que Rocío Flores es otra cuando las cámaras no están grabando : "Ponía caras despectivas, con altanería y prepotencia", y que llegó a decir cosas como: "Con lo que ganaba le daba para comprar un piso y un coche".
