Xanra Falcó va volviendo poco a poco a la rutina después de que se haya enfrentado en muy poco tiempo a muchas pérdidas familiares. Primero perdió a su padre, Carlos Falcó, tras haberse contagiado de coronavirus, más tarde su marid o, Jaime Carvajal, moría de manera repentina, y por último se ha despedido de su tío Fernando Falcó.
Ahora ha sido nombrada Presidenta del Círculo Fortuny tras morir su padre el Marqués de Griñón, que fue el gran impulsor de esta asociación creada en 2009 para promover las marcas de lujo tanto dentro como fuera de España, y no solo en el aspecto comercial, sino también cultural.
Este fue uno de los proyectos más importantes del fallecido y su hija Xandra Falcó tenía un estrecho vínculo con él tanto laboral como emocional, por lo que coger el testigo de este proyecto tiene mucho significado para ella pese a que las circunstancias sean dolorosas. Esta ha sido su primera aparición oficial tras las pérdidas que ha sufrido, sin embargo, ha procurado ser discreta en lo que se refiere a su vida personal y ha hecho hincapié en la necesidad de la sostenibilidad en el impacto de las empresas culturales y creativas.
Cabe señalar que el marqués de Griñón abogó por este aspecto en algunos de sus negocios y fue uno de los primeros viticultores en adoptar medidas de este tipo para cuidar el medioambiente en su campo de Malpica de Tajo, en Toledo, donde tenía unas bodegas que no han podido resistir la pandemia del coronavirus y que echarán el cierre.
Una aparición con muchas ausencias
Esta presentación se hizo de manera telemática, aunque ella estuvo acompañada por Eva Baquedano, que fue la encargada de dar paso a los diferentes participantes, a Claudia D'Arpizio y a Matteo Capellini, dos de los socios de esta corporación en la que el lujo es el centro. Coger el testigo de su padre ha sido el primer paso para volver al día a día para Xandra Falcó, aunque no está siendo nada fácil.