Las fotografías serían una evidencia para demostrar que el testimonio de Jessica Mann, una de las denunciantes, es cierto.
Tras haberse suspendido la novena jornada del juicio contra Harvey Weinstein porque una de las denunciantes, Jessica Mann, sufrió un ataque de pánico al testificar en la Fiscalía, se retomó la vista oral el martes 4 de febrero. Tras terminar con el interrogatorio a la exactriz que aseguró haber sido violada varias veces por el exproductor y reconocer que había mantenido con él una relación sentimental fingida para prosperar profesionalmente, el jurado popular compuesto por 12 personas totalmente anónimas ha tenido que enfrentarse a uno de los momentos más complicados de los 2 meses que se espera que dure el juicio.
Todos y cada uno de los miembros han tenido que observar unas imágenes en las que supuestamente se veía el cuerpo completamente desnudo de Harvey Weinstein. Estas imágenes, por preservar la intimidad del acusado, no fueron proyectas en el pantalla grande ante el resto de la sala sino que fueron entregadas impresas a cada uno de los miembro del jurado. Los allí presentes aseguraron que el primero que las vio -una mujer- hizo un gesto que evidenciaba sentirse bastante incómodo. Otros en cambio las comentaron entre ellos e incluso llegaron a reírse. Un total de 72 imágenes tomadas en la oficina del Fiscal del Distrito de Manhattan el 18 de junio de 2018 como parte de la pruebas que presentaría la Fiscalía contra el productor. En las primeras vistas orales de estes juicio que dio comienzo el 22 de enero, la acusación pidió que 7 de esas imágenes fuesen utilizadas como evidencias ante el jurado popular para "identificar las características" de su cuerpo. El motivo no es otro que las declaraciones dadas por una de las denunciantes, la mencionada Jessica Mann.
La joven describió minuciosamente el cuerpo del exproductor para demostrar que realmente había tenido relaciones íntimas con él. La exactriz describió los genitales de Weinstein como "deformados" asegurando que están cubierto de "cicatrices extremas" y que llegó a pensar que realmente no tenía y se trataba de "una persona intersexual" ya que "parecía tener una vagina" o también que "había sido víctima de quemaduras". Mann habló con tanto detalle ya que aseguró que lo recordaba perfectamente de las veces que le había obligado a realizarse sexo oral. Junto a estas declaraciones, la denunciante también contó que la noche que pasó con él en marzo de 2013 en un hotel y en la que asegura haber sido violada, encontró en una papelera una jeringuilla de un producto médico que aparentemente era para inducir la erección. Las bromas de Harvey Weintein
Una vez terminada la sesión, Weinstein salió como cada día en compañía de sus abogados y directo a coger un coche. En este trayecto una periodista le preguntó acerca de las fotografías que habían sido mostradas al jurado popular: "¿Eran fotos tuyas desnudo esas que se pusieron a mirar los miembros del jurado?", a lo que el acusado respondió con cierta ironía y sarcasmo: "No, era la Playboy". Estas son una de las pocas palabras que se le han escuchado decir a Weinstein desde que dio comienzo el juicio un par de semanas atrás. La única declaración que hizo a los medios desde entonces fue cuando aseguró que, pese a que ya había alegado que no sería un juicio justo, él tenía "buenos abogados".