Violeta Mangriñán y Fabio Colloricchio se convirtieron en padres por segunda vez de Gia el 1 de febrero de 2024. Desde ese momento se están adaptando a esta nueva etapa de su vida, pero sin descuidar su trabajo y ocupaciones. La influencer ha estado haciendo recados, entre ellos ha llevado a la pequeña a su revisión médica, y también ha comentado que ha decidido cuidarse, es por eso que ha vuelto a ir al psicólogo.
Violeta Mangriñán y Fabio Colloricchio besándose en Los 40 Music Awards 2022La extelevisiva ha contado a través de su cuenta de Instagram que después de dos años ha decidido volver a terapia. Fue antes del nacimiento de su primera hija cuando dejó de ir, y ahora ha vuelto de manera presencial, tomándoselo muy en serio por el bien de su salud mental.
Pero no solo cuidará de sí misma, sino que también lo hará de su relación, y así lo contaba: "Cuarta parada y más importante del día. después de dos años he vuelto a terapia, hoy he empezado el psicólogo de nuevo y de forma presencial. Terapia a nivel individual y en pareja con Fabio. Era uno de los propósitos más importantes de este 2024 y tenía muy claro que iba a empezar en cuanto diese a luz. Estoy muy orgullosa de mí y de nosotros", ha comentado.
Fabio Colloricchio y Violeta Mangriñán besándose en el evento de 'MO' de MultiópticasVarios seguidores no han tardado en reaccionar, y es que hay quienes le han indicado que en poco tiempo más de una persona pensará que van a terapia de pareja porque quizás están en crisis, nada más lejos de la realidad. Una seguidora le daba un aviso, aplaudiendo el paso que han dado, pero diciéndole que es muy probable que los rumores vuelvan a surgir. Ella no ha tardado en contestar, diciendo: "Estoy preparada y, lamentablemente, acostumbrada".
Cansada de los rumores
Hace unos meses ella misma contaba cómo estaba su relación después de que los rumores de crisis volvieran a surgir: "Llevamos once meses siendo papás y estamos aprendiendo, nadie nace aprendido. Al principio nos costó un poco a los dos, porque somos primerizos, pero cada día lo hace mejor y cada día estoy más orgullosa de él", recalcaba. " Me sacan cada mes una crisis nueva. Pero vamos, que tenemos peleas como todas las parejas, discusiones que nos duran máximo cuatro horas, que no nos acostamos sin haber hecho las paces. Y de momento, con todo el trabajo que tenemos y siendo padres recientemente, bastante bien lo llevamos. No me puedo quejar de nada", decía.
