Violeta Mangriñán se ha llevado uno de esos sustos que ninguna mujer embarazada -y en realidad nadie- quiere sufrir en pleno embarazo: tener un accidente de tráfico. La ahora influencer está embarazada de seis meses y se convertirá en madre de la pequeña Gia -así se va a llamar su segunda hija- a finales de este 2023 o principios de 2024. Por suerte, todo se ha quedado en eso, un susto, y los daños físicos han sido prácticamente nulos.
Era la propia Mangriñán la que le contaba a sus seguidores lo que había ocurrido: " El Cabify en el que iba circulaba bastante rápido para la calle en la que transitábamos y no ha tenido capacidad de reacción para frenar, nos hemos estampado contra un coche que salía de un garaje de pleno ", explicaba sobre el momento en el que ocurrió todo.
A consecuencia del impacto, Violeta Mangriñán que iba sentada en la parte de atrás del coche salió despedida contra el asiento del copiloto: " Me duele la frente, el abdomen por el tirón del cinturón con la tripa, pero sobre todo el cuello ". A pesar de ello, todo parece más aparatoso de lo que fue por suerte para ella: " Para lo que ha sido el golpe, podría haber sido mucho peor ", reconoce.
Además, casualidades de la vida, el coche que salía de ese garaje con el que chocó el Cabify en el que viajaba Magriñán iba conducido por una chica que ella conocía de haber coincidido alguna que otra vez en el gimnasio. "Ella también estaba muy asustada", reconoce también narrando la historia en su cuenta de Instagram.
"Gia está perfectamente"
Por supuesto, en cuanto Violeta puso en conocimiento de lo ocurrido a su pareja y padre de sus hijas, Fabio, este fue hasta el lugar de los hechos y se la llevó al hospital para que un médico revisase que todo estaba bien, también la pequeña Gia: "Chic@s, estoy bien. Gia está perfectamente. Estoy en el hospital a la espera de que me vean el cuello que es lo que más me duele".
Por este mismo motivo, Violeta Mangriñán finalmente no acudió al cumpleaños de Dulceida que tenía lugar esa misma noche en Madrid, una fiesta de pijamas con otras muchas influencers. Además, Mangriñán también tenía a su madre de visita en Madrid después de estar sin verla dos meses: "Espero estar bien con ella y que mi cuello me permita hacer algún plan con ella". Al día siguiente, el sábado, las cosas ya habían mejorado un poco: " Me encuentro bien, me duele el cuello cuando lo giro para los costados, pero supongo que es normal y que pasará en cuestión de días. Para variar no he pegado ojo, Gala se ha despertado bastante y me dormí viendo una serie que me dejó helada". Tal y como se puede ver también en sus stories, finalmente la influencer pudo salir a hacer planes con su madre por Madrid.