Galería: Boda de Pilar Rubio y Sergio Ramos
Cuando los casi 500 invitados a la boda de Sergio Ramos y Pilar Rubio recibieron la invitación para el enlace también recibieron un libro de instrucciones puesto que los novios no querían dejar absolutamente nada en el aire. En dichas indicaciones, además de indicarse el protocolo de vestimenta, también se informaba a los invitados de que no iban a poder usar los teléfonos móviles durante la celebración.
Tras la ceremonia en la Catedral de Sevilla, todos los invitados iban a tener que pasar por una salita para depositar allí su teléfono móvil antes de acceder a las instalaciones de la finca del futbolista en la que se celebró una gran fiesta hasta el amanecer que contó con diversas actuaciones en directo y atracciones de feria. Todos lo sabían, pero no todos lo cumplieron.
Si a Victoria Beckham le dio igual que en ese libro de instrucciones se pidiera a las mujeres que no empleasen ciertos colores en su look como el blanco y el rosa, tonalidades que ella decidió lucir, también le dio igual que no se pudiera introducir el teléfono móvil al banquete y la fiesta para celebrar el 'sí quiero' de Pilar Rubio y Sergio Ramos.
La diseñadora, en un momento dado de la noche, decidió cambiarse de zapatos, cambiando el modelo salón buganvilla que lució para la ceremonia por unos salón en color naranja. Un cambio de calzado que mostró a sus seguidores de las redes sociales con un stories en el que todo apunta a que estaba ya en el momento discoteca de la noche a juzgar por la escasa luz con la que contaba.
Carla Barber enseñó la zona de 'boxes'
Es cierto que no se desvela absolutamente nada de lo que ocurría a su alrededor, pero usó el teléfono móvil y además usó las redes sociales. Algo que también hizo otra de las invitadas, esta vez por parte de la novia, Carla Barber.
La modelo mostró también a través de sus stories de Instagram a sus seguidores cómo era esa salita a la que podían acudir los invitados para coger sus teléfonos móviles y conectarse con el mundo exterior a esa finca. "Parada en boxes", decía su publicación mostrando lo que estaba ocurriendo en ese zona en la que, según ella misma ha explicado, sí estaba permitido tomar imágenes.