"Voy a hacer pública una contestación porque desde que estoy en redes no es la primera, ni probablemente la última vez, que se me cargan culpa, se me juzga sin compasión (o incluso se me insulta) si no obedezco a peticiones", escribía la propia influecer la sección de stories de su cuenta oficial de Instagram en la que atesora más de 1,3 millones de seguidores. Ella misma aclara que, pese a poner mucho de su parte día a día con la gente que le sigue, le suelen pasar cosas como esta por el simple hecho de no responder un mensaje privado.
En el extenso mensaje que le había escrito esta persona, le pedía a la influencer si podría hacer promoción a través de su cuenta de Instagram de una iniciativa que había puesto en marcha a través de su farmacia en Pamplona para ayudar a los afectados por el coronavirus. Este mensaje no había recibido respuesta cuando la propia Verdeliss compartió en sus stories una foto promocional de un sorteo. Este detalle hizo que este seguidor en cuestión estallase en cólera contra Verdeliss haciéndoselo saber a través de otro extenso mensaje privado.
"Ya hemos visto que el dinero o la fama lo 'pudre' todo"
Para desgracia de esta persona, tiempo después Verdeliss sí que leyó el primero y, sobre todo, el segundo mensaje, a los que no dudó en responder punto por punto. Primero le hizo saber que cada mes se propone dar promoción a varias cuentas que tienen algún fin solidario "porque son de mi tierra o porque me tocan la fibra" y lo hace completamente gratis, a pesar de forma parte de su trabajo. A eso hay que sumarle que su perfil de Instagram recibe un mensaje privado cada 3 segundos, un hecho que hace inabarcable poder leerlos y responder a todos. Algo que, en su caso en particular, se suma a otras tareas de su vida personal como sus siete hijos, una casas y otros trabajos que sostener más allá de su perfil de Instagram. Pero Verdeliss se quiso poner todavía más sería para defenderse a sí misma ante los ataques que leyó en mensaje. "No voy a tolerar que catalogues ni mi ética ni mi moral. No tienes ni idea de lo que he ayudado o dejado de ayudar", sentenciaba la influencer ante uno de los muchos mensajes que recibe echando por tierra su trabajo poniendo en duda que sea o no una buena persona por el simple hecho de cómo gestiona sus redes sociales.