El accidente ocurrió de madrugada y afortunadamente Taylor Swift no se encontraba en ese momento en su casa. Según el medio estadounidense TMZ, La Policía sospechó de un vehículo que no llevaba matrícula, el conductor adolescente desobedeció las órdenes de detención y se dio a la fuga. Después del incidente, se demostró que el coche era robado y contenía tanto alcohol como marihuana dentro. El delincuente se enfrenta a delitos por conducción temeraria, obstrucción a la autoridad, conducir sin licencia, posesión de drogas y robo. En el coche se encontraban también otras dos personas, menores de edad.
La respuesta de Taylor Swift
"Después de una fuga de coche, no viene nada bueno", con estas palabras Swift lamentaba lo ocurrido en su cuenta de Instagram. Esto ha sido lo único que ha pronunciado la artista tras el altercado. La mansión, valorada en 25 millones de dólares no es la primera vez que recibe huéspedes inesperados. En 2016, el obsesivo Joseph Bernatche se presentó en la casa de la cantante pidiéndole matrimonio, mientras que Roger Alvarado ha llegado a acudir hasta tres veces, intentando llamar la atención de Swift.
Roger Alvarado ya ha sido detenido y se enfrenta a una pena de prisión de entre dos y cuatro años, según dictó el 1 de abril el Tribunal Supremo de Manhattan. Respecto al último incidente, se conoce que el responsable es Shykeim Edwin Lewis, de diecinueve años, que tras todos los cargos que le imputan también tendrá que pasar un tiempo en prisión.