OJALÁ ANÓNIMA

Las 6 veces que Sara Carbonero no querría haber protagonizado un titular

Desde que se hiciera mundialmente conocida por su relación con Iker Casillas, Sara Carbonero desearía haber sido una persona anónima y con menos repercusión en algunas ocasiones.

Ángela del Caz 03 Febrero 2019 en Bekia

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Desde que cursaba tercero de carrera empezó a trabajar cubriendo información deportiva. De Radio Marca pasó a Cadena Ser. De ahí comenzó su andadura en televisión en La Sexta y tras su paso por el canal de Atresmedia llegó su desembarco a Mediaset, donde dio el pelotazo y el punto de partida de su nueva vida. Nueva se mira por donde se mira, tanto a nivel profesional como personal. Un giro de 180 grados que traía cosas tanto maravillosas como horrorosas.

Una nueva vida de popularidad y fama con la que tuvo que aprender a lidiar, tanto por todas las ventajas que le aportada o le podía llegar a aportar, como también por todo lo negativo que podía suponer el hecho de estar absolutamente en el disparadero todos sus movimientos. Y es que todo lo que hace (o más bien hacía porque consiguió 'regresar al anonimato' ligeramente con su mudanza a Oporto siguiendo los pasos de Iker Casillas) se convierte en noticia y eso le ha provocado tener que ver publicados algunos titulares que nunca hubiera deseado.

Es más, Iker Casillas abrió su corazón en una entrevista con Iñaki Gabilondo hablando abiertamente de cómo vivió Sara Carbonero ese boom de popularidad repentino, asegurando que también considera que se le atacó muchas veces sin razón y con el único propósito de hacerle daño a él: "Era una persona casi anónima. Le vino todo grande al principio". Aquí van algunas de esas ocasiones en las que hubiera deseado ser una persona completamente anónima y pasar totalmente desapercibida.

El BESO del apoyo y la popularidad

Por supuesto, no se puede empezar a pensar o a repasar titulares que Sara Carbonero no querría haber tenido que ver publicados por los medios de comunicación del mundo entero el beso con el que alcanzó la máxima popularidad y que dejó boquiabiertos hasta los por aquel entonces mismísimos Príncipes Felipe y Letizia y la Reina Sofía.

Iker Casillas tenía que celebrar la gran victoria de la Selección Española con él a la cabeza con todo el que se pusiera a su lado y mucho mejor si eran allegados. Y claro, en ese momento, con todo el subidón, si viene tu novia, solo piensas en abrazarla y comértela a besos. Tardó unos segundos en hacerlo pero no se pudo aguantar el beso que dio la vuelta al mundo,

Una reportera envuelta en críticas

Un beso con el que celebrar que España acababa de ganar su primer Mundial de fútbol pero también con el que mostrarle su máximo apoyo por todo lo que había tenido que vivir en lo que a críticas se refiere en las últimas semanas. Y es que las redes sociales fueron especialmente duras con ella.

A muchos no les parecía adecuado que Sara Carbonero estuviera a pie de campo y la lluvia de críticas se convirtió en huracán cuando La Roja perdió su primer encuentro frente a Suiza y lo acusaron a cierto presunto despiste de Iker Casillas mirando supuestamente a la banda donde se encontraba su chica.

Acusaciones y habladurías en las que la pareja nunca ha querido entrar como tal pero sí a veces han comentado el daño que causan ese tipo de cosas. "Sara Carbonero se lo ha currado. No es fácil ser mi novia y periodista", comentó en una ocasión el portero. Por su parte, ella llegó a comparar las críticas con la caza de brujas de la Edad Media.

Su confusión en 'Pasapalabra'

Noviembre de 2011. La fama de Sara Carbonero no dejaba de crecer. Decenas de firmas de moda y belleza requerían su imagen como embajadora de la marca para impulsar sus ingresos como la espuma. Todo lo que tocaba se convertía en oro y todo lo que hacía era analizado con lupa, fuera lo que fuese.

De ahí que tuviera que soportar otra increíble lluvia de críticas cuando acudió como invitada a 'Pasapalabra' y, lógicamente, no se supo absolutamente las respuestas de todas las preguntas que le fueron haciendo. Pero como una cosa es no sabértelas y otra es confundirte... Rápidamente las redes sociales se le echaron encima puesto que, al ser preguntada por la capital de Suiza, teniendo que formar la palabra uniendo sílabas, dijo 'Zurich' y no 'Berna'.

"Que Sara Carbonero se ha equivocado?? Será porque le falta una asignatura para acabar periodismo...o no...", decía un tuitero. "Hay que regalarle a Sara Carbonero un mapa político de Europa para que se lo estudie... Aunque a lo mejor no lo termina, como periodismo...", bromeaba otro, haciendo ambos hincapié en que la presentadora deportiva no tenía acabada su carrera de periodismo.

Su boda

Y junto a su faceta profesional, en la que incluso podría llegar a entender que se le criticase aunque algunas veces los comentarios estuviran lejos de ser una crítica constructiva y buscaran dañar, muchas veces Sara Carbonero también ha leído en prensa titulares sobre su vida privada que le hubiera gustado que no estuvieran o que se publicaran cuando ella así lo considerase.

No por ser titulares negativos pero sí porque ella (o la pareja en este caso) no querían que viera la luz. El 20 de marzo de 2016, a algo más de dos meses para el nacimiento de su segundo hijo Lucas, Iker Casillas y Sara Carbonero aprovecharon las vacaciones de Semana Santa para darse el 'sí quiero' en una ceremonia civil en el Ayuntamiento de Boadilla del Monte a la únicamente acudieron los dos testigos reglamentarios y su hijo mayor Martín.

La pareja pretendía que absolutamente nadie, excepto los testigos lógicamente, supieran de su boda puesto que pretendían guardarlo en secreto hasta hacerlo público en una gran fiesta. Pero no fue posible puesto que se filtró a la prensa que ya eran marido y mujer y así fue como se enteraron sus familiares y amigos, algo que no les sentó nada bien. "Lo hemos hecho así porque no nos gusta estar en boca de todo el mundo ni nos gusta que nos estén mirando con lupa. Siempre con fotos y siempre noticias nuestras", declaró días después el portero en un evento público en el que fue preguntado por ello.

'Mala madre'

Y si de su boda se quisieron conocer absolutamente todos los detalles para analizarlos con lupa, por supuesto no iba a ser menos con su faceta como madre. Las famosas están expuestas a absolutamente todo y de ahí que lo que hacen o dejan de hacer con sus pequeños sea criticado hasta el punto de tildarlas de 'malas madres' a veces incluso con comentarios muy hirientes.

Evidentemente Sara Carbonero no iba a ser menos. Ya desde el nacimiento de Martín sabe bien lo que es leer o escuchar ese tipo de comentarios, pero fue tras el nacimiento de Lucas cuando atravesó el peor momento al aceptar presentar el reality de Divinity 'Quiero ser'. Muchas fueron las críticas que recibió asegurando que lo que tenía que hacer es dar ejemplo y cogerse la baja por maternidad.

Ella, aunque no acostumbra a hacerlo, sí decidió salir al paso y explicar que una cosa es una trabajo de ocho horas diarias y cinco días a la semana y otro es aceptar un trabajo en el que tenía que viajar de Oporto a Madrid cada ciertos días para grabar durante varias horas: "Lucas es mi prioridad. Quiero que no se juegue con eso. No podía aceptar un trabajo de ocho horas al día, cinco días a la semana", dijo muy tajante al respecto.

La decoración de la habitación de Martín

Y por si todo esto fuera poco... también la forma de decorar la habitación de su hijo Martín ha traído cola. Desde muy pequeñito Sara Carbonero siempre ha contado que a su hijo le apasiona el mundo animal y el mundo de la fotografía, y que es feliz aprendiendo sobre los el mundo animal.

De ahí que tanto en sus cumpleaños como en su habitación los animales sean los grandes protagonistas. Eso sí, lo que nunca se habría imaginado es que esa decoración nueva de la que tan orgullosa está le iba a traer tantos problemas. "En ocasiones veo animales. #animalessoloanimalesynadamás #Martínrules #Porto #slowlife #home", decía Sara Carbonero orgullosísima de lo que estaba viendo. Y sin imaginarse por supuesto comentarios del tipo: "Después el niño verá normal ver animales disecados en las paredes de algunos sitios, claro que sí" o "creo que los niños deben de tener un concepto de los animales de cuerpo entero siendo felices en su hábitat y no como trofeos de unos cazadores".

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