Vania Millán está viviendo un momento muy especial y feliz después de que anunciara a través de sus redes sociales que está embarazada de su primer hijo. La modelo llevaba años persiguiendo este sueño y por fin ha visto cómo se ha cumplido. En medio de esta nube de emoción, compartió un vídeo en sus redes sociales en el que se mostraba muy agradecida por todos los mensajes que había recibido de felicitación, así como muchos otros de personas que están atravesando una situación parecida a la que ella ha vivido hasta conseguir su embarazo.
La espera ha sido muy larga, e incluso ha sido difícil para su matrimonio, porque comenzó a ser tratada con tratamientos de fertilidad en Valencia, pero debido a los continuos viajes que hacían que no tuviera una vida tranquila, decidió decidir siendo tratada en Madrid, y fue ahí cuando consiguió quedarse embarazada.
Ahora ha aparecido en su primer evento después del anuncio de tal preciosa noticia y no ha podido mostrarse más feliz y radiante, es más, ha presumido por primera vez de sus curvas pemamá. "Yo me he quedado embarazada con 45, pero yo no empecé a querer quedarme embarazada con 45, mucho antes, incluso en mi anterior matrimonio y tenía 35. Llevo 10 años intentándolo", ha contado sobre este largo camino hacia la maternidad.
Por otro lado, ha contado que estaba deseando poder dar esta noticia, diciendo: " Tenía muchas ganas. Me daba tanta felicidad que es verdad que al principio me daba cosa porque si pasaba algo inesperado". Su marido, además, ha sido un pilar fundamental en este camino, y así ha hablado de Julián Bayón: "Él está bien, súper ilusionado y contento. En el fondo me ha acompañado en este camino. Era una sube y baja de decisiones, sigo, no sigo es una explosión de alegría. Durante un tiempo me costó asimilarlo, de hecho todavía digo ¿ha sucedido?".
Ha sido un proceso muy duro
Su embarazo ha sido posible gracias a un tratamiento de fecundación in vitro, y ha contado del mismo: "La verdad es que lo dije hace poco, me he sentido muy acompañada en este camino. Por casualidad lo comenté un día. No esperaba un seguimiento y me he sentido súper acompañada. Y cuando di la noticia me he sentido arropada. Es todo un proceso, yo sabía cuándo me implantaban. El conseguir la implantación tampoco te asegura nada, vuelves a una incertidumbre mayor. Y así una semana y otra con altibajos, puede ser que sí o no. Los primeros meses fueron de mucha incertidumbre. De hecho algunas me han escrito que tuvieron problemas en la semana 30".