Ha sido en esta declaración donde ha revelado algunos detalles estremecedores de su experiencia, en concreto cómo se enteró de la muerte de ambos. La viuda ha explicado que se enteró por primera vez del accidente cuando su asistente llamó a la puerta y le dijo que el helicóptero de Bryant se había precipitado al vacío, en ese momento le dijeron que había cinco supervivientes, por lo que tenía esperanzas en que ellos no fueran víctimas mortales, pero después empezó a recibir muchos mensajes en su móvil de condolencias.
Por eso se desplazó hasta la oficina del sheriff de Malibú en coche acompañada por el gerente general de los Lakers, Rob Pelinka, para ir desde allí hasta el lugar del accidente. En ese momento el sheriff le ofreció su ayuda como ha contado: "Y me dijo: '¿Hay algo que pueda hacer por usted?' Y yo le dije: 'Si no puede traer de vuelta a mi marido y a mi bebé, por favor, asegúrese de que nadie les haga fotos'. Y él dijo: 'Lo haré'. "Y le dije: 'No, necesito que hable por teléfono ahora mismo y necesito que se asegure de proteger el área'".
Un mal trago
Pero estas palabras no fueron cumplidas y por eso ahora ha tenido que declarar, es más, hubo un agente que realizó más de 100 fotos con su teléfono móvil personal. "El impacto del accidente del helicóptero fue tan dañino, simplemente no entiendo cómo alguien puede no tener respeto por la vida y la compasión y, en cambio, optar por aprovechar esa oportunidad para fotografiar a personas sin vida e indefensas para su propia diversión enfermiza. Mi vida nunca volverá a ser la misma sin mi esposo y mi hija", añadía Vanessa Bryant.