Vanesa Lorenzo ha vuelto a España. Tras pasar unas semanas en Nueva York con Carles Puyol y su hija Manuela, la modelo hizo las maletas con su familia para instalarse de nuevo donde tienen su hogar, en Barcelona. Desde allí, se desplazó a Madrid para estar presente en la primera edición de los premios de la revista Interiores.
La empresaria se mostró muy simpática y habló largo y tendido sobre su embarazo y sobre su familia. Luciendo gestación y sin bajarse de los taconazos en ningún momento, la catalana recordó que estaba teniendo un embarazo envidiable y que estaba ya de siete meses y un poco más.
Su hija será española
Lo que sí ha notado es que está más cansada, ya que ahora tiene con ella a Manuela, a la que define como "una gamberrilla que tiene en casa", que eso sí, está deseando que nazca su hermanita para "darle el chupete y ayudar con la niña". Asimismo, ha comentado que no tiene antojos, como tampoco los tuvo cuando esperaba a Manuela, y que tan solo come un poco más ahora que está encinta. Tras la insistencia, terminó reconociendo que le apetece un poco más comer crêpe suzette.Aunque todo es felicidad para ella, Vanesa Lorenzo ha señalado que Carles Puyol y ella no logran ponerse de acuerdo con el nombre que recibirá su segunda hija: "Estamos entre dos, pero no estoy convencida. Está la cosa difíciil, va a salir y no tendremos nombre".
Finalmente, respondió que pese a que le haría ilusión casarse, "es tan fuerte sentir la unión con una persona a través de un hijo" que está bien como está. También aseguró que no descarta ir a por el tercero y que la niña nacerá en España: "Doy a luz la primera semana de enero y lo haré aquí, la niña será española".