El día que Paz Padilla y Antonio Vidal conocieron la terrible noticia de que tenía un tumor cerebral sin cura se paró la vida de los dos. Semejante diagnóstico supone un maremoto en la vida de cualquier persona y en la de ellos no fue menos. La humorista estuvo volcada en el cuidado de su marido hasta el último de sus días y organizó todo tal cual se lo había pedido él para que la despedida fuera inolvidable.
Su peculiar manera de afrontar la pérdida y el duelo tras la muerte de Antonio fue objeto de muchos comentarios pero Paz Padilla ha conseguido seguir con su vida hacia delante y superar un momento tan terrible como este. Todos los que la rodean han estado volcados en ella y Anna Ferrer ha sido su pilar fundamental. Su única hija ha estado muy pendiente de todo y también ha vivido esta pérdida con mucho dolor.
Ahora que han pasado dos años, Anna Ferrer ha hablado del tema en el programa 'La influencia' de Cope y ha contado cómo vivió la situación asegurando que estuvo muy asustada por la situación en la que se encontraba su madre: "La gente me decía que cuidase de mi madre, me ponían mucha responsabilidad. Yo también tuve que vivir mi propio duelo, tenía mucha relación con él, para mí también fue muy duro ".
El ultimátum para Paz Padilla
Anna Ferrer estuvo al pie del cañón en unos momentos muy delicados para toda la familia y así lo contaba en la entrevista en la radio: " También tenía que ser el apoyo principal de mi madre y que ella estuviese bien, era mucha responsabilidad ", explicaba. No cabe duda de que la situación era muy complicada y Paz Padilla necesitaba el apoyo de todos para salir hacia delante tras la pérdida de su marido.
Precisamente por eso, Anna Ferrer tomó una decisión drástica: " Le di un utlimátum y se asustó y dijo: 'Si mi hija me está diciendo esto, a ver qué pasa ", contaba. Está claro que la preocupación de la influencer por ver a su madre devastada por la pérdida fue lo que la impulsó a decirle a los tres meses del fallecimiento que tenía que empezar a vivir de nuevo para evitar que cayera enferma o que le pasara cualquier cosa fruto de la tristeza.