La exclusividad de los nombres de los retoños de los rostros más conocidos del entorno del 'famoseo' han alcanzado sus límites, pues la elección del nombre que tendrán los 'mini celebrities' producen en los padres más de un dolor de cabeza. Un hecho que antes se limitaba a un entorno más cerrado como el familiar para decantarse por un nombre u otro, ahora se expande hasta llegar a las tendencias, pues los 'baby's names' se han convertido en una elección it más que tomar. Y es que en ocaciones la casualidades se convierten en protagonistas de este tipo de aspectos, nombres como Sasha, Enzo o Tristan han sido los elegidos por varias familias reconocidas. ¿Pura coincidencia o víctimas de las tendencias 'baby's names'?
Tristan: Gran personalidad
Derivado de una leyenda celta, Tristan ha sido la elección que ha triunfado en mundo 'celebrity español'. La primera familia que se decantó por este nombre infrecuente fue la que ha formado el actor Chris Hemsworth y la actriz Elsa Pataky, quiénes anunciaron en su segundo embarazo que esperaban mellizos, Tristan y Sasha. Un nombre que es originario de una leyenda celta y que tiene como significado un gran carácter al igual que una gran personalidad, una características que estos padres han querido que sus hijos tengan.
Y aún no ha nacido pero ya ha adquirido un nombre tendencia, bajo una familia guiada por el patriarca Bertín Osborne. El hijo de Eugenia Ortiz nacerá con un nombre que ha causado furor en los últimos meses en el entorno celebrity. El quinto nieto del presentador también se llamará Tristán.
Enzo: Un nombre monárquico
El rey de Cerdeña tuvo la oportunidad de popularizar este nombre que ha llegado hasta tierras españolas apoderándose de los nombres de los bebés de los célebres en el mundo futbolístico. Los rostros más reconocidos en el campo futbolístico como las familias del actual entrenador del Real Madrid Zinedine Zidane, el jugador Marcelo, Guti o el jugador de FC Barcelona Sergio Busquets han caído en un efecto dominó ante el poder del nombre de Enzo.
Corto, de fácil pronunciación y con gran popularidad ante el mundo deportivo, el 'baby boom' de los futbolistas ha ido en una sucesión de embarazos que han terminado bautizando a sus pequeños retoños con este nombre. En la última ocasión ha sido Sergio Busquets; el centrocampista del FC Barcelona he decidido junto a mujer Elena Galera que su primer bebé tuviera este nombre aunque sin una explicación en especial.
Aunque no todo se mueve a toque de balón, el hijo de la baronesa Thyssen, Borja Thyssen también decidió en su momento que su cuarto bebé con Blanca Cuesta recogiera aguas bautismales bajo este nombre. Un nombre de orígenes italianos que ha logrado establecerse en tierras españolas consiguiendo que sea un nombre 'top' entre las familias más famosas.
El 'Sasha Boom'
De origen griego y con uso unisex este nombre ha adoptado la forma de los rostros 'minis' en familias como la de Shakira y Piqué, la presidencial Obama o la familia de actores de Hemworth Pataky. Todo apunta que los mellizos de la pareja más atractiva de Australia han causado sensación, pues los dos poseen nombres que han llegado a la cumbre de la popularidad en la paternidad. Sin embargo, el 'sasha boom' ha sido una tendencia tan fuerte en el mundo celebrity que la casualidad ha cruzado el Atlántico llegando por último a la residencia de la cantante Shakira y Piqué.
Un nombre que tiene como significado 'el hombre que rechaza a sus enemigos' un hecho más que acertado en el caso de Piqué, quién se ha visto en vuelto en más de una polémica por verter críticas ante los jugadores del Real Madrid. Este nombre que deriva en el español como Sandra o Sandro se ha vuelto más 'trendy' tras la elección de estas celebrities para nombrar a sus pequeños, una elección que ha desembocado en toda una tendencia llegando a convertirse en uno de los nombres más seleccionados en el mundo de los famosos.
Siendo o no casualidad, los nombres de los 'mini celebs' han llegado a convertirse en toda una odisea para sus padres, que buscan la exclusividad, originalidad y, sobre todo, el reconocimiento de un nombre bonito para sus pequeños frutos del amor. La variabilidad de los nombres han evolucionado hasta puntos impensables que permitirán llegar a un campo más internacional, incluso más allá como la imaginación.