Toño Sanchís pierde los papeles en cuanto ve a la prensa tomándole fotos de la mudanza que está haciendo de su hogar por la demanda que le puso Belén Esteban.
Parece a Toño Sanchís no le queda más remedio que abandonar la casa que ha sido su hogar durante varios años. El exrepresentante perdió la batalla judicial contra Belén Esteban y ahora está obligado a pagar sus deudas con la princesa del pueblo y es por esto que la casa de Sanchís tuvo que ser embargada. A pesar de que aún no ha pujado nadie por su vivienda, es un hecho que va atener que decirle adiós a la que había sido su casa durante estos años.
La subasta de la vivienda comenzó el 29 de enero y a partir de esta fecha el exrepresentante tenía 20 días para abandonar la casa ya que esta iba a ser adjudicada a su nuevo propietario el 18 de febrero. El colaborador de 'Sálvame' Gustavo González afirmó que para tenderle una especie de "trampa" a la colaboradora, Sanchís estaba buscando un inquilino que alquilase la vivienda, pero por lo que parece, esto no ha llegado a suceder y lo más probable es que el inmueble termine a manos de la propia Belén Esteban.
Pero la princesa del pueblo ya estaba bastante informada de las triquiñuelas que pretendía hacer Sanchís: "Lo que cuenta Gustavo ayer es cierto, él se pone en contacto conmigo. En la sentencia judicial viene muy claro, esa casa no tiene ningún arrendatario, o sea... La sentencia lo tiene claro, yo después de tanto tiempo que llevo con este proceso, ya queda poco", comentaba Belén Esteban.
No quiere que lo graben haciendo la mudanza
Con tan poco margen de tiempo, es normal que Toño Sanchís y su familia estén comenzando a hacer la mudanza pero lo cierto es que si eso ocurre, la familia del exrepresentante tiene bien claro que no quieren que nadie se entere ya que hace pocos días, cuando el exrepresentante estaba recogiendo unas cajas del que aun es su domicilio, decidió llamar a la policía en cuanto vio a los cámaras y redactores esperándole frente a su casa. A pesar de que la policía acudió a su vivienda, estos no tuvieron más remedio que informarle que grabar en una calle pública no incumple ninguna norma, por lo que no pueden hacer nada.