La modelo parece que ha llegado a su límite y no quiere que su marido siga siendo una figura ausente en su familia.
Tom Brady y Gisele Bündchen están atravesando una complicada crisis en su matrimonio que es muy probable que termine en ruptura. La pareja, tal y como informa el medio CNN, vive en casas separadas mientras intentan solucionar su situación, aunque muchos creen que en realidad se están preparando para su divorcio. Según fuentes cercanas al matrimonio, es evidente que existen problemas en su relación, es más, ella quiso poner tierra de por medio desplazándose a Costa Rica.
Parece que la decisión de separarse la tomaron más de un mes atrás, y los posibles motivos son que Brady no pasa el tiempo suficiente con su familia. Ya la exmodelo lo reveló en una entrevista con la revista Elle, diciendo que el deportista no está nunca disponible. Su decisión de regresar a la NFL apenas unos días después de anunciar su retirada sentó muy mal a la brasileña, ya que pensó que se trataba de una retirada definitiva, por lo que podría pasar mucho más tiempo con ella y con sus hijos, dos en común y otro hijo mayor de una relación anterior. Pese a ello, la exmodelo dejó claro que entiende que Tom Brady quiera seguir haciendo lo que le hace feliz, no obstante, eso hace que esté en muchos momentos importantes fuera de casa, como en cumpleaños, Navidad o Acción de gracias. Y no hay que pasar por alto que ella decidió dejar su trabajo para poder estar más tiempo con sus hijos, por eso cree justo que él también sacrifique parte de su carrera con el deseo de continuar siendo una familia.
"Me mudé a Boston y me concentré en crear un hogar y un ambiente de amor para que mis hijos crecieran y se criaran y estar ahí para apoyarle a él y sus sueños", contó en una ocasión, pero parece que la brasileña ya se ha cansado de esperar a que llegue su turno de seguir con su pasión, que es la moda. Pese a que la modelo deseó lo mejor al equipo de su aún marido en el primer partido de la temporada, no estuvo presente como ha ocurrido en otras muchas ocasiones. Sabe que siempre está ausente
Lo cierto es que Tom Brady es consciente de los problemas que hay en su hogar. En una conversación con Jim Gray en el podcast 'Let's Go'!, Tom Brady se sinceró sobre el tiempo que le ha quitado ser exitoso: "No he tenido una Navidad en 23 años y no he tenido un Día de Acción de gracias en 23 años. No he celebrado cumpleaños con personas que me importan que nacieron entre agosto y finales de enero, no puedo estar en los funerales y tampoco puedo estar en las bodas. Creo que llega un punto en tu vida en el que dices: '¿Sabes qué? Me he hartado y es suficiente, es tiempo de continuar, tiempo para pasar a otras partes de la vida", dijo. Pero después de un breve descanso no dudó en regresar a su pasión.