Desde entonces la influencer, muy asidua a las redes sociales, no ha escatimado en subir fotos y vídeos de su hija y su nueva vida como madre. Hace unos días, incluso, compartía un vídeo donde mostraba su rutina diaria y se veía cómo Stormi le acompañaba a todas las reuniones de trabajo, hasta tenía su propia habitación para jugar y divertirse en la empresa de su madre.
Stormi no iba a ser Stormi
Si por algo se caracteriza el clan Kardashian es por los nombres originales y excéntricos. Mason, Reign, Saint, Chicago, Dream, True, Stormi... son algunos de los nombres que las hermanas Kardashian-Jenner han otorgado a sus hijos. Sin embargo, la hija de la multimillonaria más joven hecha a sí misma no iba a recibir, en un principio, el nombre de Stormi. Así lo contó Kylie Jenner hace unos meses a través de Instagram mientras se maquillaba. Cuando se enteró de que tendría una niña, se planteó ponerle el nombre de Rose, mucho más común y clásico. Finalmente, pensó en Storm y le añadió una 'i' para que tuviese la misma terminación fonética que Kylie, algo de lo que se alegra. "Definitivamente nunca voy a llamar Rose a mi hija", dijo, en el caso de que tuviese más.