Conor Kennedy no quiere separarse ni un segundo de su reciente novia Taylor Swift, e incluso le lleva a todo tipo de actos familiares. La cantante country ha tenido una gran aceptación en el clan Kennedy, quienes la invitaron a pasar unos días en su mansión de Cape Cod en Massachussetts.
''Ellos me enviaron un mensaje de texto una hora antes de la boda para preguntarme si podían venir'', dijo Vicki al diario Boston Herald. Conor no había confirmado su asistencia en ningún momento, por lo que daba por hecho que no asistiría. ''Yo les repondí claramente, 'Por favor no vengan', y a pesar de todo fueron. Yo me acerqué personalmente a la señorita Swift, cuya entrada distrajo todo el evento, y educadamente me presenté y le pedí de la manera más cortés que pude que se marchara. Fue como si le hablara a un fantasma'', explicó furiosa la madre de Kyle.
Taylor Swift se convirtió en el foco de atención
El motivo principal por el que no quería que la cantante asistiera era para que no quitara protagonismo a su hija en el día de su boda. Sin embargo, la pareja causó un gran revuelo a su llegada y fueron el centro de atención durante el evento.
Por otro lado, el representante de Taylor ha negado que estos hechos sean ciertos y ha asegurado que la artista fue a la boda porque tenía su invitación, de hecho, la novia se mostró muy agradecida de que la joven hubiera asistido.