Tamara Gorro siempre es una mujer muy optimista, que trata de animar a todo el mundo y que siempre tiene una sonrisa y una buena palabra. Hasta en los peores momentos sabe sacar el lado más positivo. Eso es lo que ha tenido que hacer desde que su marido Ezequiel Garay dio positivo en la prueba de coronavirus y ha tenido que permanecer aislado en una habitación de su casa de Valencia. Ahora llega un nuevo e importante paso.
Así lo ha contado y mostrado la influencer en una fotografía en la que aparecen ambos sentados en las escaleras de su casa estirando sus brazos con ganas de tocarse pero todavía sin poder hacerlo: "¡¡¡Un paso más!!! Y aunque no podamos besarnos y abrazarnos, estamos juntos. Celebrando que el aislamiento terminó, y felices porque un paso más hoy en día es una victoria ", escribía.
Tamara Gorro, con algo de ansiedad
Además también ha querido explicar que está siguiendo todas las indicaciones que les han dado y cumpliendo con todas las precauciones para evitar un posible contagio: "Estamos siguiendo las indicaciones médicas: después de estar en aislamiento se debe continuar catorce días más en cuarentena, manteniendo la distancia y las mascarillas ".
Una grandísima noticia ante la que Tamara Gorro no puede estar más feliz después de estar pasando los peores días desde que empezó el confinamiento. Ella misma ha contado que no se encuentra bien, que siente un cansancio excesivo y que le falta el aire. No obstante, ha querido quitarle gravedad al asunto considerando que lo único que tiene es un cuadro de ansiedad.