La vida de Tamara Falcó ha dado varios vuelcos en apenas varios días, pero no como se hubiese imaginado. Emocionada, hizo saber a través de su cuenta de Instagram que iba a casarse con Íñigo Onieva, pero a las dos días de conocerse dicha noticia salió a la luz un vídeo en que se podía ver cómo el empresario se besaba con otra chica que no era la televisiva en un festival que ha tenido lugar hace escasas semanas.
Él quiso salir del paso diciendo que se trataba de su asistencia a dicho festival años atrás, apareciendo los dos públicamente en su asistencia a la boda de unos amigos, y e insistiendo Onieva en que se casarían, le pese a quien le pese. Pero lo cierto es que la tranquilidad, por llamarlo de alguna manera, les duró más bien poco, porque salieron a la luz nuevos vídeos besando a la misma mujer, haciendo que Onieva dejara de tener una clara defensa.
Después, y en vista de cómo se estaban desencadenando los acontecimientos, el empresario no dudó en compartir un comunicado en sus redes sociales, asumiendo su infidelidad y pidiendo perdón a Tamara Falcó: "En los vídeos difundidos aparezco en una actitud inaceptable, de la cual estoy absolutamente arrepentido y destrozado por ello. Pido disculpas por no haber sido honesto y pido perdón a Tamara y a su familia públicamente".
La duda que surge ahora es en qué punto está su relación, aunque a juzgar por las palabras de la periodista Beatriz Cortázar, parece ser que la Marquesa de Griñón ha tomado la decisión de romper su vínculo con Onieva. " La relación está completamente rota y no hay marcha atrás. Tamara nunca ha sido una mujer consentidora y ya no pasa ni una", ha dicho la periodista.
Él tiene esperanzas
Tamara está destrozada y se ha refugiado en casa de su madre Isabel Preysler, hasta donde se ha trasladado su primo Álvaro Castillejo, con el que tiene una buenísima relación. Parece ser que en un primer momento Falcó se creyó la primera versión de Onieva, diciendo que las imágenes se correspondían al año 2019, pero fueron las pruebas siguientes la que consiguieron quitarle la venda en los ojos, una mentira que ha sido destapada poco después de que él le pidiera matrimonio e incluso pusieran fecha a su boda. "Él tiene esperanzas de que la historia se arregle, tal y como le ha contado a sus amigos más íntimos está convencido de que se va a arreglar ", ha dicho Antonio Rossi, pero todo parece apuntar a que será más bien complicado que algo así suceda.