Tamara Falcó está viviendo uno de los mejores momentos de su vida, porque todo le sonríe tanto en lo personal como en lo profesional. La socialité ha aparecido como una auténtica estrella de cine para formar parte del anuncio de la marca Sisley, un rodaje que ha tenido lugar en el hotel Four Seasons de Madrid.
Para esta ocasión ha llevado un espectacular vestido de color rojo de Pronovias, y ha sido en su llegada cuando ha comenzado a actuar, saliendo de un coche y siendo 'bombardeada' con muchísimas fotos, algo que formaba parte del rodaje, aunque en realidad se corresponde un poco a su día a día y más en la semana en la que se ha conocido que mantiene una relación sentimental con Íñigo Onieva.
De momento sus palabras sobre esta nueva ilusión han sido algo escuetas, eso sí, ha hecho saber que está muy feliz. De momento lo que no puede celebrar es su marquesado de Griñón, ya que de momento no ha salido publicado en el BOE, aunque con paciencia lo conseguirá.
Una vez más se ha mostrado muy resuelta delante de las cámaras y es que sus últimos trabajos televisivos le han aportado más naturalidad si cabe. Ahora es colaboradora de 'El Hormiguero', espacio en el que tiene cabida junto a Nuria Roca y Juan del Val, pero también se la puede ver en La 1 presentando un programa de cocina en el que además elabora platos.
Una nueva ilusión
Últimamente no deja de encadenar compromisos, sumados a su cumpleaños el 20 de noviembre de 2020 para celebrar sus 39, edad que ha podido celebrar con su madre Isabel Preysler y también con la pareja de esta Mario Vargas Llosa. Pero lo que más llama la atención de este momento de su vida es que tiene el corazón ocupado, ya que el diseñador de coches Íñigo Onieva ha llegado pisando fuerte. Después de este rodaje pudo ser vista cenando -una noche más- con él y con otro grupo de amigos, justo un día después de que se confirmara su relación tras ser vistos compartiendo besos y abrazos en una actitud bastante cariñosa en el interior de otro restaurante de la capital.