No son tiempos fáciles para Tamara Falcó, a pesar de que deberían estar siendo los más felices y románticos. El pasado jueves 22 de septiembre, la marquesa y su novio, Íñigo Onieva, compartían en redes sociales la ansiada confirmación de algo que se venía comentando durante semanas: su compromiso. El empresario le había pedido matrimonio con un original y elegante anillo y ella había dicho su ansiado sí.
La pareja estaba en un momento muy bonito pero no hizo falta esperar mucho para que se estropeara. Al día siguiente, un vídeo de Íñigo Onieva besándose con otra mujer en un festival de música provocó un auténtico terremoto e hizo tambalear los cimientos de la relación. Sin embargo, la pareja tenía que acudir a una boda esa misma tarde y lo hicieron juntos, de la mano y aparentando normalidad.
El anuncio de compromiso de Tamara e Íñigo | InstagramEl empresario fue el que tomó la palabra y se dirigió a los medios para decir que el vídeo era del año 2019 y que se iban a casar le pesase a quien le pesase. Pues bien, parece que las cosas no están tan claras porque el sábado 24 de septiembre Tamara Falcó tomaba una drástica decisión en la época en la que estamos: borrar la publicación de Instagram en la que anunciaba su compromiso con Íñigo Onieva mostrando su anillo y dándose un tierno beso.
A casa de su madre
El hecho de que Tamara Falcó haya borrado esta publicación apunta a que la situación está más delicada de lo que quisieron aparentar acudiendo a la boda juntos. A la marquesa se la pudo ver por la mañana en los alrededores de su casa con los perros y visiblemente desencajada, pero al que no se ha podido ver hasta el momento ha sido a Íñigo Onieva, quien parece preferir no ser visto por los medios de comunicación y evitar preguntas incómodas.
Tamara Falcó e Íñigo Onieva salen de su casa para ir a una bodaAdemás, en esta vorágine de acontecimientos, la revista Semana ha publicado que Tamara Falcó se habría marchado a casa de su madre, Isabel Preysler, para tomar distancia de la situación y, probablemente, para que le aconseje como solo sabe hacer una madre. No cabe duda de que el que tendría que ser el momento más feliz en la vida de ambos se ha torcido por las malas acciones de Íñigo Onieva, que están prácticamente probadas.
