El primogénito de Federico de Dinamarca descubrió a dos intrusos en el jardín de la residencia de verano de la Familia Real.
La Familia Real Danesa ha tenido un buen verano a pesar de la tristeza por la muerte de Enrique de Dinamarca, fallecido el pasado 13 de febrero a los 82 años. Su viuda, hijos, nueras y nietos han asimilado que el Conde de Monpezat ya no está, y han logrado volver a sonreír tras una etapa complicada.
En el caso de la pareja heredera y sus hijos, han pasado unos días recorriendo Dinamarca a bordo del crucero real Dannebrog. Antes habían estado en Gråsten Slot, residencia de veraneo de la Familia Real Danesa, donde año tras año se reúnen numerosos miembros de la dinastía reinante en el país escandinavo para pasar unos días de vacaciones.Un susto sin consecuencias para la Familia Real
Fue allí precisamente donde ocurrió un suceso protagonizado por el Príncipe Christian. Como señala Expressen, durante una noche de juegos en los jardines, el primogénito del Príncipe Federico, de 12 años, sorprendió a dos personas que habían logrado colarse en la propiedad. El nieto de la Reina avisó a los guardias del palacio estival, que lograron reducir a los intrusos.
Los individuos son un hombre y una mujer de en torno a 30 años que se colaron al saber que había árboles frutales. Como declararon, buscaban coger algunas frutas de los terrenos de Gråsten Slot y no tenían intención de entrar en el edificio o de hacer daño a la Familia Real Danesa.