La mala relación entre Sonia Ferrer y su exmarido, Marco Vricella, se aviva por momentos. Aunque tras su separación del cirujano para irse a vivir con Álvaro Muñoz Escassii, al que conoció a su paso por el programa 'Mira quién salta', ya pudimos asistir a los primeros cruces de acusaciones, no ha sido hasta que una jueza ha establecido la custodia compartida entre ambos cuando ha comenzado una cruenta guerra abierta.
La presentadora acudió junto a su actual pareja a ver la función de Fin de Año de su hija Laura y, al no ver a su exmarido entre los asistentes, estalló para las cámaras a la salida del colegio. " Así es como está cumpliendo él su primera semana de custodia compartida. Yo ya se lo dije a la jueza. No está en Madrid, está fuera, esta noche mi hija ha dormido con una persona a la que paga para que esté con su hija, que es la que ha traído la niña al colegio esta mañana, que es la que ha venido, de hecho, a ver la función del colegio de su niña, en vez de estar él. Yo no digo que sea mal padre, lo que digo es que no ha estado nunca presente, no ha estado criando a su hija ", dijo Ferrer a Hola.
Posteriormente, afirmó que no piensa que Vricella sea un mal padre, simplemente que sus compromisos profesionales le impiden estar al cargo de la niña como debería. Además, aseguró estar muy triste por separarse por primera vez durante tanto tiempo de su hija y que lo que más desea es que mejore la comunicación entre ellos para que no afecte al cuidado de la pequeña.
De nuevo enamorado
A la espera de que Vricella se pronuncie sobre estas acusaciones, el exmarido de Ferrer parece estar de nuevo ilusionado en el amor. La revista QMD! ha publicado unas fotografías del doctor junto a una italiana con la que mantiene algo más que una amistad. Además, se asegura que, tan bien marcharía esta relación, que el exmarido de la presentadora ya ha decidido que su hija y su pareja se conozcan. ¿Estará de acuerdo Sonia Ferrer?