En medio de toda la polémica generada por las cenizas de Carmen Sevilla, la artista hubiera cumplido 93 años el día 16 de octubre y por esa razón sus sobrinas han querido rendirle un bonito homenaje. Elena y Carmen, las hijas de Pepe Galisteo, hermano de la fallecida, han organizado una misa funeral a la que han acudido amistades y familiares para rendirle homenaje el día de su cumpleaños.
Las sobrinas han organizado la misa en la parroquia de San Francisco de Borja y hasta allí se han desplazado algunas amistades de Carmen Sevilla porque la cantante era muy querida por todos ellos. Hasta la parroquia han acudido rostros conocidos como Pablo Sebastian, con el que compartió grandes momentos, así como Marily Coll, íntima amiga suya.
Pablo Sebastian, Marily Coll y demás amigas en el funeral en memoria de Carmen Sevilla por su cumpleañosTodos estos meses han tenido recuerdos bonitos hacia Carmen Sevilla, con la que tuvieron una estrecha relación durante largos años. Evidentemente, la misa estuvo marcada por la ausencia de Augusto Algueró, el hijo de la artista. Todo lo relacionado con su fallecimiento se llevó en la más estricta intimidad y tampoco apareció en la misa funeral que le hicieron los amigos que no se pudieron despedir de ella ni en vida ni en el tanatorio.
Aclarando asuntos
En esta ocasión, según dijo su sobrina Elena, Augusto Algueró tenía un viaje organizado y estaba fuera, por lo que no podría acudir, pero lo cierto es que esta ausencia no supone ninguna novedad, ya que siempre ha permanecido al margen de todos los que querían a su madre. Por otro lado, muy cuestionado ha sido también el tema de las cenizas, pues salió la información de que llevaban 105 días en el tanatorio sin ser recogidas.
Carmen Sevilla con su hijo Augusto Algueró JuniorLa sobrina ya lo dijo en su momento pero ahora ha vuelto a pronunciarse sobre ello, asegurando que le pidieron a su primo ir a recoger una parte de las cenizas para hacerse un relicario y que allí estaban todas las cenizas cuando ellas acudieron, siendo un operario el que les habría indicado que la urna principal aún no había sido recogida por la única persona autorizada para ello, su hijo.
