Sergio Ramos llegó a París pisando fuerte, si embargo, la temporada en el PSG tras dejar el Real Madrid no ha ido como se imaginaba. Su carrera futbolística en el club francés ha sido prácticamente inexistente, teniendo en cuenta que ha encadenado lesión tras lesión, es más, tan solo ha podido disputar cinco partidos. En vista de esta situación son muchos los rumores que circulan, y ahora parece ser que quizás exista un nuevo destino al que mudarse.
Lo cierto es que después de tantos meses con recaídas, por fin ha podido entrenar una semana entera, por lo que a lo mejor decida quedarse para cumplir con su contrato, algo que adelantada L'Equipe, por lo que quizás sea en junio de 2023 cuando se marche. No obstante, aunque parece que está viendo la luz al final del túnel, ahora ha sido Japón el lugar que ha comenzado a sonar como posible.
Parece que desde la liga japonesa quieren tener las primeras tomas de contacto con él, es más, ha roto con su anterior firma para firmar un gran contrato con la marca deportiva japonesa Mizuno. Él mismo lo anunciaba en sus redes sociales. El defensa está obligado a llevar sus botas de fútbol, así como la ropa deportiva y la vestimenta del día a día, y contaba cómo había sido fichar por Mizuno así: " Estoy orgulloso de ser el nuevo embajador de Mizuno, una marca deportiva japonesa con una historia tan importante en el fútbol. De niño ya usaba botas Mizuno y recuerdo que me duraron muchísimo".
Quizás esta marca japonesa sea una especie de trampolín para dejar París y mudarse a Japón, aunque sin saber a dónde exactamente. El Vissel Kobe, equipo de Andrés Iniesta, es uno de los club que más suenan para pujar por el fichaje de Ramos. Así que de esta manera seguiría también los pasos de otros futbolistas como Fernando Torres o David Villa.
No se sabe qué pasará
Por el momento, Sergio Ramos está dispuesto a disfrutar al máximo su paso por el PSG, concentrado en retomar su posición en el campo para anotar goles y redimirse de su mala etapa llena de lesiones. Asimismo, su mujer y sus hijos están adaptados a su vida en París, disfrutando de las oportunidades y planes que les aporta la ciudad, o aprendiendo un nuevo idioma, no obstante, y como Pilar Rubio ha hecho saber en alguna ocasión, apoyará a su marido incondicionalmente.