Sergio Ramos y Pilar Rubio podrían pagar parte de su boda gracias al documental del futbolista

La boda de Sergio Ramos y Pilar Rubio ha sido planificada durante meses y mees para que no faltara detalle, y es que la pareja ha conseguido que su enlace se convirtiera en el evento del año por la enorme cantidad de invitados que ha acudido -muchas celebridades entre ellos- y por todo el dinero que ha costado, creando muchos puestos de trabajo.

Sergio Ramos mirando muy enamorado a Pilar Rubio a su llegada a la finca para celebrar su boda

Ha habido un increíble despliegue de medios de comunicación y ambos han invertido un gasto millonario. En la finca del jugador se instalaron varias atracciones de feria, hubo un banquete de lujo de la mano del chef con tres estrellas Michelín Dani García y actuó ni más ni menos que la banda de rock Europe. Seguro que la factura de tal fiesta da miedo, aunque Sergio Ramos puede que haya hecho la mejor jugada de su vida y encima habría sido fuera del terreno de juego.

Parece que Sergio Ramos y Pilar Rubio, a pesar de su increíble capital, habrían contado con una 'ayuda' para costear su alucinante boda, y habría sido una de las empresas más reconocidas mundialmente. Diario de Sevilla ha dado a entender que el proyecto audiovisual sobre al vida del jugador que está haciendo para Amazon Prime puede que sea lo que pague este enorme despliegue. La docuserie constará de ocho capítulos que se pretende que duren alrededor de una hora y media cada uno, y hay quienes creen que la boda puede que sea uno de los momentos estrella del proyecto.

Sergio Ramos y Pilar Rubio posando a su llegada a la Finca La Alegría tras su boda

¿Se podrán ver más detalles de la boda?

Así que lo más seguro es que la boda sea incluida en uno de esos capítulos y Amazon Prime podría correr con los gastos de las increíbles facturas de la celebración. Además, de esta manera se explicaría que la pareja haya mantenido tanto secretismo alrededor de la celebración y por eso pidieron a los invitados que no acudieran con los móviles, aunque era algo que quedaba en cada persona y no hubo un control de seguridad a la entrada para retirar los teléfonos móviles de los invitados.