Selena Gomez ha viajado al pasado. No es que la joven artista haya adquirido una máquina del tiempo, no, es que el domingo 7 de febrero sacó su vena más nostálgica retrocediendo a su infancia. La exestrella Disney se ha refugiado en Barney, el dinosaurio de Barney & Friends, este mágico momento llega después de aparecer en una sesión fotográfica sexy para la revista W.
No obstante, esta bonita imagen dista muy lejos de la realidad, ya que en Gomez no hay ni una pequeña huella de la infancia de la que ella disfrutó. La joven cantante ha vuelto a protagonizar una sesión de fotos, en esta ocasión, para la publicación W, donde las fotos son de lo más sugerente; además ha vuelto a hablar de su expareja Justin Bieber.
Agotada de las mismas preguntas
En la entrevista que acompaña a la sesión fotográfica ha puesto fin a cualquier especulación sobre una posible reconciliación entre ella y el cantante canadiense. "Estoy tan agotada, sinceramente estoy está hecho y no hay nada, solo me preocupo por su salud y bienestar", ha declarado a la revista. Lo cierto es que en estos últimos tiempos le han relacionado con el actor Orlando Bloom, y también con el One Direction Niall Horan.