Sobre todo, para aquellos a los que llegar a este punto les ha costado verdaderos esfuerzos durante largos años. Sin embargo, no a todos se les presenta esta meta tan cuesta arriba, haciendo que incluso en poco tiempo puedan adquirir o deshacerse de no solo una, sino de varias propiedades sacadas de auténticos cuentos de hadas. Y este no podría ser el caso de otros protagonistas que no fueran las celebrities más conocidas del mundo entero.
Solo ellos son capaces de sorprender, en un momento, con increíbles y millonarios 'casoplones' y, a la primera de cambio, anunciar su mudanza hacia otro punto del planeta. Solo ellos tienen la facilidad -y el dinero, por supuesto- de cambiar de domicilio cuando les venga en gana. Y es que, ya sea por cuestiones puramente profesionales o personales, lo cierto es que seguir el rastro de las estrellas de Hollywood no parece ser tarea fácil para quienes se dedican a ello.
Un día aquí y otro allí; esa es la filosofía de vida que rodea a estas figuras tan aclamadas, vitoreadas y perseguidas por millones y millones de personas en toda la tierra. Como ocurre con una de las estrellas del pop con mayor experiencia sobre los escenarios y sobre las portadas de las revistas de música y del corazón: la norteamericana Britney Spears.
Britney Spears y su fortuna en Thousand Oaks
Una cantante de armas tomar que ya con su 'Baby One More Time', 'Oops!... I Did It Again' y 'Toxic' consiguió rápidamente meterse al público en el bolsillo y a los que ahora pretende dejar boquiabiertos con sus enormes palacetes. Y hay que decir que dicho cometido tampoco se le da nada mal. De esta forma, la ganadora del premio a la Artista Pop Favorita de los People's Choice Awards 2014 insiste en poner los dientes largos a más de uno. ¿De qué manera? Alardeando de una fortuna que no parece tener fin.
Y si ya hace un año, por estas mismas fechas, lograba causar sensación con la adquisición de una nueva mansión en Thousand Oaks -entre la ciudad de Los Ángeles y Santa Bárbara-, ahora Spears vuelve a la carga revelando otra de sus reliquias mejor guardadas en este famoso enclave de California. Un 'casoplón' de primera que, sin duda, enamora a primera vista y que la artista ha decidido poner a la venta para, quizás, invertir en nuevos y lujosos caprichos.
Lo más extraño es descubrir que la cantante decidiera apropiarse, el año pasado, de una primera vivienda en este privilegiado entorno californiano, teniendo ya como propiedad esta auténtica joya de la construcción. Sin embargo, tanto terreno y tantos metros cuadrados por donde perderse han acabado animando a la intérprete de 'Crazy' para acabar lanzando al mercado esta maravillosa y segunda mansión. Toda una delicia, hay que decir, para quien puede permitirse el lujo de convertirse en su nuevo dueño.
Además, el afortunado que logre hacerse, finalmente, con las llaves de esta propiedad no sólo estará asegurando sus próximos años rodeado de una fortuna inmejorable, sino que también podrá presumir de haber vivido bajo el mismo techo en el que Britney Spears pasó nada más y nada menos que 4 años de su vida. Así es. Fue exactamente en el año 2012 cuando la de Misisipi se animó a desembolsar la friolera cantidad de 6 millones de dólares e iniciar una nueva vida como si de un miembro de la realeza se tratase.
Con vistas a las montañas de Santa Mónica
Una nueva etapa en la trayectoria de esta estrella del pop en la que sus 800 metros cuadrados de vivienda pasaron a ser los mejores aliados de su día a día. Allí, el relax, el disfrute y la desconexión eran posibles para la también actual diseñadora de moda, gracias a su extenso jardín, su acogedora piscina, su huerto y su tan planificada repartición de cada una de las estancias de la casa. Empezando, por supuesto, con los espacios comunes, donde la amplitud y la iluminación logran hacerse con el control de cada uno de sus rincones.
Lugares sin apenas obstáculos donde todo queda abierto a una increíble y acogedora terraza y que convierten a las montañas de Santa Mónica en el fondo de pantalla perfecto. Un paisaje admirable desde, prácticamente, cualquier punto de la vivienda y que se alza como el mejor acompañante de sus reuniones y citas en el exterior de la casa. Ya sea en sus zonas ajardinadas o en otro de sus comedores, pudiendo incluso demostrar sus dotes culinarias en la parrilla o preparando flamantes cócteles en la zona de bar.
Y es que cualquier plan es posible en la que, hasta hace poco tiempo, era residencia de Britney Spears en Los Ángeles. Hasta sus propios hijos, Sean Preston y Jayden James, tenían su propio espacio reservado en esta lujosa mansión de Thousand Oaks. Concretamente, una sala de cine y otra de juegos donde reunir a decenas de amigos y disfrutar de una jornada en casa divertida, entretenida y sin apenas molestar a la reina del pop.
Aunque, por supuesto, también hay exquisiteces dedicadas exclusivamente a quien un día fue pareja de Justin Timberlake, como por ejemplo la existencia de un vestidor, dos oficinas de trabajo separadas, siete baños de lujo con jacuzzi y ducha y cinco amplios dormitorios donde tampoco se pierde detalle. El empleo de una paleta de color neutra, la presencia de elementos decorativos en madera, la utilización de grandes cabeceros... Una fusión entre lo rústico y lo moderno que invade, al fin y al cabo, toda la casa al completo.
Desde su inmensa cocina, con sus dos islas centrales y encimeras de mármol blanco, hasta su propio salón, donde las tonalidades grisáceas parecen recargar el ambiente y en el que su piano también se habrá encargado de ambientar mágicas veladas junto a la voz de su ya ex propietaria. Sin dejar de mencionar tampoco una de las peculiaridades que alberga la distribución de sus dormitorios y cuartos de baño, dividiéndolos en tres secciones: una primera con el cuarto principal y su baño, una segunda para los niños y una última para los invitados. Y todo ello por el "módico" precio de 8 millones de dólares.