Galería: Gala de los Dragones de Oporto 2017
La presentadora se convirtió en una de las protagonistas de la noche al acompañar a su marido a la Gala de los Dragones de Oporto. Dicha fiesta fue organizada por el equipo en el que juega Iker Casillas desde que aterrizó en Portugal. Mientras que el jugador de fútbol espaol llevaba un discreto traje azul marino con corbata a juego, ella se decantó por un wrap-dress de color mostaza en raso, incluyendo volantes y un gran escote bardot. Por otro lado, añadió unas sandalias de terciopelo y accesorios en distintos tonos.
Iker Casillas y Sara Carbonero en la Gala de los Dragones de OportoAmbos desfilaron por la alfombra con una gran sonrisa y agarrados del brazo. Este es el tercer año que asisten a esta gala y cada otoño consiguen deslumbran, sobre todo Sara Carbonero. Además, utilizaron las redes sociales para publicar imágenes del evento.
Parece que Iker Casillas sigue conteniendo su sonrisa, o al menos intenta no enseñar los dientes porque, al parecer, lleva ortodoncia desde hace poco y prefiere no enseñar sus aparatos. Por otro lado, Carbonero enseñó los momentos previos de la gala como la canción que iban escuchando de camino e su coche, 'Moonlight Shadow' de Mike Oldfield.
Sara Carbonero e Iker Casillas en la Gala de los Dragones en una foto divertidaEn dicha fiesta se reunieron con varias amistades como vienen acostumbrando desde que se mudaron a Oporto. Se ha adaptado de maravilla y disfrutan de momentos muy especiales entre amigos y familia. Sus hijos, al menos Martín, van manejando el portugués mejor que sus padres, y aprovechan para hacer de guías turísticos siempre que pueden.
Un futuro por delante en Portugal
Mientras que el portero ha renovado un año más su contrato, ella se dedica a nuevos proyectos y uno de ellos está relacionado con la literatura según revelo en su blog: "No he parado de escribir. He escrito más que nunca, por la mañana, por la tarde, por la noche y sobre todo de madrugada. No lo he hecho en el blog, pero pronto sabréis de lo que os hablo".
